La nueva portavoz del PP en el Ayuntamiento de Valencia, Maria Àngels Ramon Llin, admitió ayer que todos los concejales y asesores del partido entregaron 1.000 euros para financiar la última campaña electoral, aunque negó que luego esas cantidades les hubieran sido devueltas en sobres, lo que hubiera podido interpretarse como blanqueo de dinero. Ramon Llin aseguró que se trata de una práctica normal que utilizan casi todos los partidos y que no supone irregularidad alguna, por lo que pide que el caso se investigue cuanto antes.

Al parecer, estas donaciones están en el centro de la operación «Taula», en la que se investiga el cobro de comisiones en el PP y la financiación irregular del partido. En esa trama de «mordidas» es parte destacada la exconcejala de Cultura María José Alcón, y la Guardia Civil sospecha que parte de ese dinero irregular iba al grupo municipal en el ayuntamiento de Valencia para financiar, entre otras cosas, las campañas electorales.

Concretamente, investigan si los concejales y asesores, que son más de 50 cargos públicos, ingresaron en la cuenta del partido 1.000 euros cada uno para la campaña electoral y luego ese dinero les fue devuelto en metálico, dentro de un sobre, lo que podría constituir un delito de blanqueo de capitales.

Día de dar explicaciones

Las cabezas visibles de esa operación serían la secretaria de grupo, Carmen García Fuster (detenida y puesta en libertad con cargos), a la que se le atribuye el reparto de los sobres; la administrativa María José Pi (investigada), mano derecha de García Fuster con acceso a las cuentas; y el presidente del Partido, Alfonso Novo (investigado, pendiente de declarar ante el juez), que por su cargo orgánico sería el responsable de las cuentas bancarias.

Ayer, por tanto, era día de dar explicaciones y lo hizo la nueva portavoz del Grupo Popular, Mª Àngels Ramon Llin, que sustituyó a Alfonso Novo tras su suspensión de militancia en el Partido Popular. Antes del pleno municipal celebrado ayer aseguró que «esto no es ninguna novedad». «Todos los miembros del Grupo Popular desde hace mucho tiempo aportamos una cantidad de 60 euros al mes, como hacen otras formaciones políticas, y efectivamente en un momento determinado de la campaña se aportaron 1.000 euros y ya está, como algo absolutamente normal». «Esto forma parte de una normalidad que se sabe y que no tiene mayor trascendencia», insistió.

Al preguntarle si ese dinero les era devuelto después en metálico, que es la clave del posible blanqueo, Ramón Llin habló de lo que conoce: «Desde luego, a mi no me lo devolvieron y yo no tengo constancia de que eso se produjera, por tanto lo que queremos es que se siga investigando y se aclaren las cosas». En el mismo sentido y tono se pronunció Beatriz Simón, quien dijo que es normal hacer «aportaciones extraordinarias» y que en la pasada campaña se hizo. Simón también aseguró que a ella no le devolvieron el dinero. «Yo no sé si se le ha devuelto a alguien, pero a mi no», dijo. Ahora, todo lo que espera el partido es que los investigados sean citados por el juez lo antes posible y tengan ocasión de explicar todo esto, coincidieron ambas concejalas.