La secretaria del grupo Popular en el Ayuntamiento de Valencia, Mari Carmen García Fuster, detenida y puesta en libertad en contra del criterio de la Fiscalía Anticorrupción, será fulminantemente destituida de todos sus cargos, según confirmó ayer la portavoz Mª Àngels Ramón Llin.

Al parecer, el miércoles por la tarde ya comunicaron al alcalde de Valencia, Joan Ribó, que García Fuster dejaba de ser asesora y secretaria del grupo municipal, que era lo que había pedido el «tripartito» apenas unas horas antes.

Es más, el equipo de gobierno ha reclamado el mismo destino para todos los cargos públicos, asesores y concejales, que finalmente sean investigados en esta trama. De lo contrario podrían actuar de oficio y proceder a su despido.

En esta situación se encontraría el asesor del PP Luis Salón, que declaró el pasado miércoles ante la Guardia Civil en calidad de investigado. Ramón Llin dijo al respecto que no hay una decisión tomada, pues «son situaciones distintas». Sí confirmó que no hay ninguna otra decisión en este sentido.