Finalmente, Juan Seva da un paso al lado. El que fuera diputado autonómico, senador y recientemente concejal en el Ayuntamiento de Alicante tiene previsto renunciar a dirigir el PP local en la capital, un puesto que le correspondería dentro del proceso de presidencia rotatoria semestral por su condición de máximo dirigente de la Junta de Distrito del PP de la Zona Norte. Sin embargo, la sentencia firme que pesa sobre él -que le inhabilita dos años para administrar bienes ajenos por la gestión del Lucentum- y el hecho de estar alejado de la política activa, tras ser excluido de la última candidatura municipal para el 24-M -hoy Seva trabaja como profesor en un instituto de Torrellano-, han sido razones de peso para que el exedil haya decidido renunciar a presidir el PP en Alicante.
El asesor en la Diputación y actual dirigente local, Ginés Lifante, tiene en agenda convocar la Junta Local de Alicante para el próximo lunes, 1 de febrero, en la que dará cuenta de la actividad interna del último semestre y anunciará la toma de posesión (que no se certificará) de Seva. En esa cita, según informan fuentes próximas al PP, el exconcejal expondrá su hoja de ruta, que pasa por renunciar al cargo que le tocaría ostentar durante los próximos seis meses y proponer una comisión gestora que dirija el futuro del partido durante al menos un año.
Según ha sabido este diario, la idea diseñada por Seva, avalada por la Dirección provincial y que se someterá a votación entre los casi ochenta miembros de la Junta Local (concejales, diputados, senadores...), pasaría por sustituir el actual sistema de la presidencia rotatoria a cargo de los dirigentes de las cinco Juntas de Distrito -ordenadas en función del número de militantes (1, 3, 2, 4 y 5)- por una comisión gestora, que esté liderada por un «sabio» del partido, algo así como un histórico del PP que esté lejos de la primera fila. Ése sería el perfil del próximo dirigente, aunque todavía no hay un nombre definitivo sobre la mesa.
Esa gestora, además del «sabio» al frente, estaría compuesta por los cinco presidentes de Junta de Distrito -el propio Juan Seva, Luis Barcala, Ginés Lifante, Marta García-Romeu y Mari Ángeles Goitia- y un número limitado de militantes, en torno a las veinte personas, que abarquen todas las sensibilidades del partido en Alicante. Eso sí, la idea inicial es que, al margen de los dirigentes de las Juntas de Distrito, en esa gestora no hubiese cargos públicos.
De esta manera, Juan Seva seguiría en el máximo órgano directivo del PP local de Alicante, pero en un segundo plano, lo que atenuaría las críticas internas y externas por la falta de «regeneración democrática» del partido, ante la condena de dos años de inhabilitación contra el exconcejal de Hacienda en el anterior Gobierno local dictada en enero de 2015. Tampoco gusta nada en la cúpula de la formación que la exconcejala Marta García-Romeu -una de las presentes en el polémico viaje a Andorra de la exalcaldesa Sonia Castedo y el empresario Enrique Ortiz en la Nochevieja de 2008- pasase a ocupar el puesto de secretaria general en el PP local de Alicante, paso previo a que tomase las riendas del partido a mediados de este año.
Entre los cambios que se pondrán sobre la mesa de la Junta Local la próxima semana no está previsto incluir modificación alguna de las actuales Juntas de Distrito. Fuentes próximas al partido sostienen que ese cambio orgánico, sumado a la gestora que propondrá Seva, podría desestabilizar la formación a nivel interno, al quedar prácticamente desmantelada de un día para otro.
