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«Coepa no asume el final del modelo de las subvenciones»

Alcaraz emplaza a la patronal «a mover ficha» y «dejar de matarse entre ellos, mientras otros les sacamos las castañas del fuego»

¿Qué diagnóstico hace de la crisis interna que vive el empresariado alicantino de Coepa, en preconcurso de acreedores y con enfrentamientos internos? ¿Qué puede hacer el Consell para retomar la interlocución?

Cualquier intento que ha hecho el Consell de ayudar, acompañando a sus dirigentes en la reflexión, ha sido estéril. El mayor problema de Coepa ahora es que no se ha dado cuenta de que el mundo ha cambiado. Y no sólo porque haya cambiado el gobierno de la Generalitat, que también, sino porque las fuentes de la economía y las fórmulas de funcionamiento de las patronales basadas en la subvención han terminado. ¿Dónde estuvo Coepa cuando la corrupción campaba a sus anchas? Pasemos página, pero todos. La patronal se dedica a matarse exquisitamente entre ellos y a seguir pidiendo que otros les saquemos las castañas del fuego. No va pasar. Tienen que mover ficha, mucho, y cada día más.

Se le nota especialmente molesto, casi dolido con el empresariado...

Lo de Coepa es la evidencia, la metáfora máxima de lo que está pasando. Hay otros problemas. Si hablan de una organización provincial, la presencia de empresarios de toda la provincia es fundamental. Es esencial poner el énfasis en una economía productiva, así como el ensayo de nuevas fórmulas de relación con el poder político. Aquí se han acabado los tics aprendidos durante décadas y determinadas relaciones basadas en el clientelismo. Por voluntad política y porque la sociedad no lo aguanta más. Dicho esto, me consta que en Coepa hay empresarios con muy buena voluntad.

Avisa a navegantes...

El aviso a navegantes queda claro, pero nosotros no vamos a entrar a decir en concreto lo que tienen que hacer. Los que tienen que saberlo, lo saben; si no lo hacen, sus razones tendrán.

¿Y que ha pasado en IFA para que su deuda, avalada por la Generalitat, alcance los 70 millones de euros?

Nos encontramos con una crisis brutal del modelo de las ferias. ¿Cuántas ferias puede haber en España? Seamos realistas. Nos empeñamos demasiadas veces en esta provincia en mantener realidades que han sido superadas por la propia realidad; nos empeñamos en mantener irrealidades. ¿Significa esto que hay que acabar con IFA? No. Pero cualquier arreglo de largo plazo de IFA debe pasar por que no se convierta en un pozo sin fondo como ha pasado con la Feria de Valencia. Empresarios, gestores y políticos deben hacer esa reflexión. Puede que lo que haya que hacer es una articulación en el calendario de ferias entre las de Valencia y Alicante. Y a corto plazo, si se quiere mantener IFA, es obligatoria la reparación de una de las naves en la que entra agua cuando llueve. ¡Menudo atractivo para captar expositores! Mientras, la conselleria de Economía ya está dando pasos adelante para buscar soluciones.

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