El líder de los socialistas, Pedro Sánchez, se mostró ayer contrario a que Podemos y sus tres marcas afines se dividan en cuatro grupos parlamentarios en el Congreso durante la próxima legislatura. Sánchez consideró ayer «muy complicado» aceptar la pretensión de Podemos, puesto que es el Senado la cámara donde se dirimen las cuestiones relacionadas con las comunidades autónomas. Es decir, el socialista argumentó su postura en que el Congreso no es a día de hoy una cámara de representación territorial.
La postura del secretario general del PSOE no hace más que echar pimienta a la relación que existe entre su partido y el que lidera Mónica Oltra. Ambas formaciones, tras las elecciones locales y autonómicas del pasado 24 de mayo, se reparten el poder de las principales administraciones valencianas: la Generalitat, la Diputación de Valencia y en numerosos ayuntamientos, como el de Valencia, Alicante, Elche o Castellón. De hecho, el jefe del Consell, el socialista Ximo Puig, convocó este pasado fin de semana a todos los consellers para un «retiro espiritual». Del Seminari Govern-Hivern 2016, el Ejecutivo valenciano salió con la hoja de ruta marcada para los próximos seis meses, con más de ochenta medidas para poner en marcha antes del verano. La Generalitat, además, se ha comprometido a dar cuentas de sus promesas al terminar el semestre.
Y mientras Puig intenta que el Ejecutivo valenciano no sea una suma de consellerias, como subrayó este pasado fin de semana, su líder nacional, Pedro Sánchez, se muestra abiertamente contrario a que el socio de Gobierno del PSOE en la Comunidad tenga grupo propio en el Congreso. Una pretensión de la formación de Oltra ante las pasadas elecciones generales y que se ha complicado por el complejo escenario político que se salió de las urnas el 20-D.
Pedro Sánchez, en una entrevista en la Cadena SER, no ocultó su rechazo a que Podemos y sus marcas afines en la Comunidad Valenciana (Compromís-Podemos), Cataluña (En Comú Podem) y Galicia (En Marea) tengan grupo propio al asegurar que el Congreso no es una cámara de representación territorial. De hecho, el socialista fue más allá, afirmando que si Podemos quiere tener cuatro grupos en la Cámara Baja tendrá que intentarlo una vez que se reforme el Reglamento del Congreso de los Diputados. Sánchez ve «muy complicado» poder aceptar la pretensión de la formación que lidera Pablo Iglesias, puesto que -a su juicio- es el Senado la cámara donde se dirimen las cuestiones relacionadas con las comunidades autónomas. «Negociar es ceder dentro de las líneas que marca el Reglamento. El Congreso no es una cámara territorial», justificó ayer Sánchez si Podemos pone los cuatro grupos como condición para apoyar al exlehendakari Patxi López como presidente del Congreso. Sánchez, además, echó mano de la hemeroteca en su beneficio propio. El líder socialista recordó que, en 1982, el PSOE tuvo la posibilidad de tener tres grupos parlamentarios -el nacional, el de los socialistas catalanes y el de los vascos-, pero renunció por suponer «cierto ventajismo parlamentario».
Sánchez resaltó ayer que el Reglamento del Congreso impide constituir grupos a aquellas formaciones que no han competido entre sí en las elecciones, como es el caso de Podemos en la Comunidad. En la posición contraria a la del PSOE se encuentra Oltra, la líder de Compromís, quien hace apenas tres días defendió grupo propio al argumentar que «Compromís no es Podemos».
