Alberto Hernández, el marido de la consellera de Sanidad Pública, Carmen Montón, no ocupará finalmente el cargo de consejero delegado de Egevesa, la empresa mixta de Aguas de la Diputación de Valencia. Hernández ha decidido continuar en su antiguo puesto de trabajo, en Bankia, para evitar que se le use «en una estrategia de erosión», según ha denunciado.

Hernández Campa asegura que se ha hecho un uso «partidista» de su nombramiento, pero la presión ejercida tras las palabras de la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, que criticó abiertamente la decisión de Egevasa al considerar que no era estética y no tendría que haberse producido, ha forzado la renuncia.

Fue a raíz de la polvareda cuando Hernández decidió renunciar al cargo. De hecho, tras conocerse el fichaje, la propia consellera de Sanidad defendía que el nombramiento de su marido se producía en administraciones distintas y que cuando pasara la polémica, la normalidad volvería al Gobierno valenciano tras los cruces de reproches entre el PSPV y Compromís.

Escrito a la junta general

Hernández ha enviado un escrito de renuncia a la junta general y al consejo de administración de Egevasa, órganos que el pasado 29 de diciembre le eligieron por unanimidad, y también ha comunicado al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, su decisión de no tomar posesión del cargo de gerente de la empresa mixta.

Con todo, el marido de Montón defiende su «larga» trayectoria profesional, aunque asegura que toma la decisión para no perjudicar a la empresa, ni al servicio público que presta.

La secretaria general del PP en la Comunidad, Eva Ortiz, aseguró el jueves que han pasado dos días de «culebrón» con «tintes patéticos», en los que la Generalitat atribuía el nombramiento a la Diputación mientras en la corporación provincial señalaban que la decisión les llegó desde el Palau de la Generalitat, según Ortiz. «Paralelamente, la vicepresidenta arremetió contra la consellera y Montón decía que esto pasaría y que se debía a ruido post-electoral; al final era tan insostenible que no han podido esperar a que escampara la tormenta», añadió Ortiz, quien remarca que el nombramiento «carecía de ética y de estética, no solo por tratarse del cónyuge de un miembro del Consell, sino por carecer de la experiencia necesaria».

«El PP lo habría justificado»

Mientras, València en Comú, con representación en la Diputación, ha agradecido a Alberto Hernández su decisión de no tomar posesión del cargo. En su opinión estas actitudes demuestran la existencia de un «nuevo tiempo y un nuevo gobierno». La formación morada asegura que en el pasado, el PP habría justificado el nombramiento y se hubiera replegado sobre sí mismo.