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«¿Sin financiación? Problemas graves»

Puig mantiene el discurso de la discriminación en su agenda e insiste en una quita del «agujero» de deuda

Durante una comparecencia en Alicante, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, mantuvo el discurso del expolio que sufre la Comunidad en el reparto de la financiación autonómica como un punto principal de su agenda e, incluso, fue un poco más allá de las declaraciones que su conseller Vicent Soler realizó hace unos días cuando apuntó que habría impagos si el Gobierno continuaba bloqueando la llegada de los fondos del rescate. «Habrá problemas muy graves», dijo Puig, en el supuesto de que, finalmente, el problema de la financiación autonómica no se resuelva, como máximo, en el próximo año.

Cabe recordar, de hecho, que el presupuesto de la Generalitat para 2016, actualmente en tramitación parlamentaria, tiene un desfase de 1.300 millones entre ingresos y gastos que la administración valenciana espera cubrir con el nuevo sistema de financiación, que está caducado desde enero de 2014 sin que Madrid haya iniciado la negociación para modificarlo. «Somos la única autonomía pobre que paga como rica. Queremos hablar de toda la tarta del dinero para que todos nos financiemos igual. Somos cinco millones que reciben cada uno 150 euros menos que el resto de España», desgranó asegurando que no quiere convertir la cuestión en una «guerra». «Queremos cumplir el déficit pero necesitamos una financiación justa para no continuar con la gran mentira del fondo de liquidez autonómica», concluyó al tiempo que abogó por una «quita» de la deuda.

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