El presidente de la Generalitat Valenciana, el socialista Ximo Puig, ha alertado de que las diputaciones provinciales carecen de competencias en "planificación económica" y ha subrayado que deben dedicarse fundamentalmente a apoyar a ayuntamientos y municipios, informa Efe.

En declaraciones a periodistas en Alicante, Puig ha sido preguntado por el foro empresarial "Alicante, territorio inteligente", organizado hoy por la Diputación en la Oficina de Armonización del Mercado Interior (OAMI) y donde se ha dado a conocer un estudio sobre el proyecto de "Zona Franca", impulsado por la institución provincial y que gira en torno al puerto de la ciudad. El president ha comentado que recibió una invitación para ir hace sólo 48 horas, por lo que cree que "no había interés en que la Generalitat participara en el evento". Asimismo, ha señalado que "las diputaciones deben dedicarse fundamentalmente a apoyar a los ayuntamientos y municipios" destacando que "ése es su espacio natural" porque "ni tienen competencias en puertos ni en planificación económica", ni tampoco existe lo que algunos llaman "gobierno provincial".

Con respecto a este evento, al que ha acudido el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, Puig ha comentado que el Gobierno central ha tenido cuatro años "para hacer muchas cosas y no ha hecho nada" efectivo para la ciudad y la provincia, y ha opinado que la presencia del ministro se inscribe dentro de la campaña electoral. De las diputaciones, ha apostado por buscar "las máximas sinergias posibles" en favor de la "conectividad de las instituciones". A su juicio, "el papel de las diputaciones es ayudar a los municipios y coordinarse con la Generalitat en cosas que se puedan hacer conjuntamente".

Asimismo ha añadido que pretende desarrollar antes de fin de año tres decretos de coordinación de las diputaciones relativas a las competencias del deporte. Una para decidir sobre las prioridades del gasto en grandes eventos. Otra sobre políticas deportivas de base, y una última en materia turística, área donde "no puede ser que las instituciones compitan".

A preguntas de los periodistas, Puig ha asegurado que no tiene "ningún problema" en dialogar con el presidente de la Diputación alicantina, el popular César Sánchez, y, tras instar a que los dirigentes políticos no "sobreactúen", ha añadido que su "adversario no es la Diputación de Alicante, ni de lejos".

Ha rechazado una de las críticas recibidas por Sánchez, quien le acusa de querer acabar con las provincias, y ha apuntado que eso "entra dentro de una estrategia de confrontación". Finalmente el jefe del Consell ha manifestado que, salvo el PP, la mayoría de grupos parlamentarios valencianos apuesta por "redefinir el papel de las diputaciones para quitarle el papel político, que a mi parecer es bastante inconstitucional".