El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, abogó ayer por la «prudencia» y apostó por el «diálogo» pese al reiterado impago del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), retenido en Madrid desde hace varios meses. A la vez recordó al Gobierno central que la demanda por la infrafinanciación de la Comunidad ya «está preparada». «No hay un plazo concreto, pero es evidente que estamos analizándolo. Ya hay encima de la mesa un estudio que ha planteado la Conselleria de Justicia e indica claramente unos caminos y están preparadas las demandas correspondientes, pero vamos a ser prudentes y dar los pasos de una manera adecuada a nuestros intereses», afirmó Puig, que amenazó recientemente al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, con una demanda si no le recibía antes de que acabara el mes de octubre. El líder de los populares finalmente le abrió las puertas de la Moncloa el pasado lunes, en un encuentro en el que se comprometió al pago inmediato de los 1.400 millones del FLA que el Ejecutivo tiene retenidos desde después de las elecciones del 24-M. Esa millonaria cantidad aún no ha llegado ayer a las arcas autonómicas. Puig insistió en que en estos momentos están «por la vía del diálogo» aunque reconoció que «nunca» han dicho «que se pueda cerrar la vía del litigio porque forma parte de la democracia». «De hecho, los tribunales están para discernir los problemas que hay cuando dos no están de acuerdo. Estamos esperanzados de que haya una vía de diálogo en el Gobierno para garantizar la financiación justa que se merecen los valencianos», resaltó ayer el dirigente socialista.

Apenas unas horas después de las declaraciones de Puig, fuentes de la Generalitat informaron que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, recibirá el próximo martes, a las seis de la tarde, al presidente de la Comunidad para tratar, entre otras cuestiones, la financiación de la Comunidad, la deuda histórica y el FLA.

El conseller de Hacienda, Vicent Soler, alertó el pasado miércoles en Alicante de posible impagos a proveedores por problemas de tesorería si el crédito del Gobierno no llega durante esta semana.

«Incoherente» para Moragues

Por su parte, el delegado del Gobierno en la Comunidad, Juan Carlos Moragues, criticó ayer al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, por «incoherente» al manifestarse «satisfecho» tras la reunión sobre financiación que mantuvo el pasado lunes con Rajoy, y un día después denunciar -a su juicio- «la persecución» del Gobierno central a la Comunidad tras la decisión del Tribunal Constitucional de admitir a trámite el recurso del Ejecutivo contra la Ley valenciana de acceso universal a la atención sanitaria a personas extranjeras en situación irregular.

Respecto a la posibilidad de que la Generalitat lleve a los tribunales al Gobierno central por el modelo de financiación, el delegado criticó que ya se ha «oído de todo». «Primero la consellera de Justicia dijo que era una irresponsabilidad recurrir; después dijeron que recurrirían; después que no, para añadir que recurrirían si Rajoy no recibía a Puig, ese era el condicional», concluyó.