La presidenta del PPCV, Isabel Bonig, ha acusado al president de la Generalitat Valenciana, el socialista Ximo Puig, y a su Consell de "no parar de llorar y lamentarse" y ha afirmado que ocupa ese cargo para actuar, por lo que si "no sabe o no puede, que se marche".

En un mitin junto al presidente del Gobierno y candidato del PP a las generales, Mariano Rajoy, y la plana mayor de su partido en la Comunitat, como el expresident Alberto Fabra y los presidentes del PP alicantino, José Císcar, y de la Diputación, César Sánchez, Bonig ha declarado que la política "es convicción, responsabilidad y actuar y priorizar, y no llantos" porque éstos, ha argumentado, "no crean empleo y no generan ilusión".

"Uno viene llorado y lamentado de casa", ha subrayado Bonig antes de comentar que Puig es el president "con el peor resultado del PSOE y ha sido elegido por el pacto de perdedores".

La líder del PPCV ha señalado que si Puig, al que ve que le "falta convicción en esta tierra", "no sabe o no puede" actuar y ejecutar políticas, "que se marche" y "que no llore más", y ha proseguido que "el PP quiere y puede".

También ha criticado que el Consell de Puig "haya declarado la guerra a todo lo privado", especialmente a la educación concertada y a las escuelas infantiles, y le ha acusado de querer "traspasar todo el proceso de inmersión lingüística catalán a esta comunidad, donde la convivencia entre las dos lenguas cooficiales es pacífica".

La líder del PPCV ha insistido en la idea de que el nuevo Consell valenciano es "una losa" para el crecimiento de la Comunitat porque desconoce "la realidad del territorio" y "no sabe gobernar".

Además, les ha acusado de "sectarismo ideológico, que es característico de la izquierda aunque digan que son del consenso, diálogo y la participación social".

"Se están dedicando a revisar el pasado y a destruir lo mucho que nos ha costado entre todos construir: Eso no es alternancia política sino revancha política, y este país necesita ilusión y futuro", ha recalcado antes de instarles a que "dejen ya de escribir el pasado y empiecen a escribir el relato del futuro, que empieza con empleo y esperanza".

Ha defendido la responsabilidad y convicción como el mejor medio para cambiar las cosas y ha asegurado que sin estas cualidades se está "abocado al fracaso absoluto, que es lo que hace la izquierda siempre que gobierna porque no tiene responsabilidad ni convicción".

"La responsabilidad supone priorizar y tomar decisiones" y "la izquierda de toda la vida y los nuevos, de centro y transversales, no saben decidir y priorizar" mientras que, ha defendido, "a veces hay que tomar decisiones complicadas".

Ha añadido que ahí está el PP, partido que prefiere "hacer las cosas bien y que salgan", y que ha salvado a España de la crisis gracias a los "esfuerzos y sacrificios" pese a que ahora salgan "muchos salvadores".

"Pero yo me pregunto, cuando la tormenta arreciaba y del cielo sólo caían piedras y España iba a la deriva, ¿dónde estaban todos estos salvadores de la patria? Estaban donde siempre", se ha contestado antes de añadir que el PSOE se hallaba "detrás de una pancarta pidiendo solución al problema que ellos crearon y fueron incapaces de resolver.

"Los nuevos, que tienen la solución mágina y son los grandes salvadores, estaban escondidos esperando que la tormenta pasase para después decir 'nosotros somos la solución'. Bonita forma de luchar por tu país: Ahora es fácil porque las cosas van bien", ha indicado.

Por el contrario, ha sostenido que el PP siempre ha estado en "el centro de la tormenta", al mando del timón, y en tono de autocrítica ha admitido que se han cometido errores, aunque son consecuencia de la toma de decisiones. EFE