Ofensiva del Consell contra los casos de corrupción de la etapa del PP al frente de la administración autonómica. El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, anunció ayer el Consell estudia cómo personarse en los sumarios Valmor y Valmor Aido -instrucciones que afectan directamente a los intereses valencianos- y en la trama Gürtel, que llegó a calificar como «el caso de corrupción del PP», con el objetivo de defender los intereses de los ciudadanos de la Comunidad.
Puig, durante su primera sesión de control de las Cortes, respondió así al síndic de Podemos, Antonio Montiel, quien le preguntó si el Consell tenía previsto comprometerse a combatir la corrupción incluso personándose como acusación popular en causas penales donde la Generalitat no conste inicialmente como perjudicada directa. El presidente sostuvo ante el resto de diputados autonómicos que el Consell irá «hasta el final», «allá donde corresponda» y «sin ningún problema» con tal de defender el interés general de la Comunidad Valenciana.
Eso sí, el mandatario autonómico admitió que el «papel fundamental» corre a cargo de la Fiscalía, que es el que debe tener «el peso de la responsabilidad». En su intervención, el jefe del Consell subrayó que la corrupción es «el cáncer de la democracia», algo que «hiere a todos» moralmente y acaba «manchando» a todo el sistema y a las instituciones. Además, recalcó que la corrupción también afecta a la economía al ser una «losa» para los sectores productivos. Puig anunció además que, dentro del objetivo de la Abogacía de la Generalitat de intentar recuperar el dinero público que se ha «robado», se ha conseguido 200.000 euros de la pieza uno del «caso Blasco», que volverán a las arcas públicas y que se pondrán al servicio del conseller de Cooperación para que disponga de ellos en los próximos presupuestos.
La Generalitat en la actualidad está presente como acusación particular en Cooperación y Emarsa y como actores civiles en Nóos, todas ellas decisiones tomadas por el anterior Consell de Fabra. Fuentes del Consell explicaron ayer que la Generalitat se personará en el caso Aido -que investiga posible fraude en subvención y malversación de caudales públicos en el Instituto de la Imagen-, estando a la espera de que se le ofrezca esa posibilidad, y también estudia hacerlo en Vaersa y en Gürtel. En este último, desde la Generalitat apunta que se debe estudiar en qué piezas se puede personar, dado que para hacerlo es requisito que no se haya abierto juicio oral. En el caso Valmor, relativo a la Fórmula 1 en la ciudad de Valencia, indicaron que están pendientes de ver la evolución de los interrogatorios y cuál es la situación si se llega a imputar a miembros del anterior Consell.
Por otro lado, Ximo Puig hizo ayer un balance «positivo» de los 100 primeros días al frente de la Generalitat, aunque huyó de los «triunfalismos». Asimismo, el dirigente socialista resaltó que «ha empezado un tiempo de reparación, reconstrucción y nueva visibilidad de la sociedad valenciana». Puig, que anunció que acudirá a las Cortes cuando la Cámara se lo subrayó que «lo importante será la valoración que harán los ciudadanos cuando toque de aquí a cuatro años». El titular del Consell insistió en que lo fundamental en estos días ha sido ver cómo salían del «campo de minas» que dejó el PP tras veinte años de gobierno.
