La consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador, anunció ayer en las Cortes que el objetivo de su departamento es que a mediados de 2016 estén pagadas todas las ayudas a la vivienda pendientes para resolver «un problema muy grave que creó el PP» y que ha afectado a más de 50.000 personas. «No hay peor sensación de estafa que la propiciada por la propia administración», apuntó la titular de Vivienda e Infraestructuras en relación al impago de esas ayudas a la vivienda, que resolverá con el abono de esas cantidades.