El exconseller de Hacienda Juan Carlos Moragues es el elegido para ocupar el puesto de delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana. Moragues será nombrado hoy por el Consejo de Ministros en sustitución de Serafín Castellano, detenido e imputado por las supuestas irregularidades en las adjudicaciones a la empresa Avialsa durante su etapa en la Conselleria de Gobernación. Desde su detención, el subdelegado en Valencia, Juan Carlos Valderrama, es quien había ejercido en el puesto.

Moragues asumirá sus nuevas responsabilidades con "espíritu de diálogo y consenso" e intención de "trabajar de forma conjunta" con el Consell y "buscar pactos, acuerdos, consenso" porque ambos ejecutivos tienen "el mismo objetivo, que a la Comunitat Valenciana le vaya mejor y que sea motor de la recuperación y del empleo de España".

El exconseller ha destacado que su papel, "como delegado, va a ser positivo, constructivo", al considerar que "hay que evitar las demagogias, los debates estériles y hay que aportar todos, desde las diferentes instituciones y administraciones públicas, trabajar de la mano y en común en beneficio de la sociedad valenciana".

Preguntado por la llamada del presidente de la Generalitat, Ximo Puig, para reunirse con el presidente Mariano Rajoy, ha asegurado que desconoce "las llamadas de teléfono de Puig con el presidente del Gobierno, pero la actitud del Gobierno y de esta Delegación de Gobierno es una política positiva, constructiva, de diálogo, que es fundamental, y lealtad institucional" para "entre todos, hacer que España consolide esa senda de recuperación y de empleo".

"Y yo tiendo la mano y reafirmo mi compromiso con el diálogo, con trabajar de forma conjunta, buscar pactos, acuerdos, consenso, porque todos tenemos el mismo objetivo", ha dicho.

Moragues afrontará sus nuevas responsabilidades "partiendo de la idea de que es un proyecto común, que es España", con la Comunitat como "una parte fundamental". "Mi espíritu es de diálogo, lealtad institucional, mano tendida, cercanía, proximidad, trabajar con humildad, con eficiencia, con muchísima responsabilidad en beneficio del futuro, el bienestar y la prosperidad de la sociedad valenciana", ha recalcado.

"Mi intención es dejarme la piel"

En este punto, se ha cambiado al valenciano para remarcar que habla y piensa en esa lengua y comprometerse a "dejarse la piel en beneficio de la sociedad valenciana". "Trabajaré con todo el ímpetu, ganas, fortaleza y determinación por el futuro de nuestro pueblo y quiero ser digno representante de la sociedad valenciana como delegado de Gobierno", ha sentenciado, además de agradecer al Gobierno la "confianza" depositada en él.

Preguntado por la reivindicación de una mejor financiación, el que fuera conseller de Hacienda en la pasada legislatura ha remarcado que "es una evidencia" que esta autonomía "está mal infrafinanciada", que esta situación "ha sido reconocida por el Gobierno" y, de ahí, el "compromiso de cambiar el modelo de financiación en el plazo más corto posible".

"Vamos a trabajar de la mano del Gobierno de España para que, en este corto plazo, se pueda modificar un sistema de financiación que perjudica a la Comunitat y, mientras tanto, se implementarán todas las medidas como el tipo cero de interés" en los mecanismos extraordinarios de liquidez estatales, que supondrá un ahorro a la Generalitat en 2016 de 1.000 millones, al pasar de pagar 1.200 millones de intereses en 2014 a unos 200 en 2016. "Son medidas transitorias y temporales, a la espera del cambio del modelo", ha reiterado.

Según Moragues, "hay un contexto favorable para abordar ese cambio del modelo de financiación, pero también es verdad que 2015 es un año electoral y es evidente que hay que encontrar el modelo oportuno para abordar esa negociación", que tiene que partir "de una idea clara, que se tienen que garantizar los servicios públicos y fundamentales en igualdad de condiciones, independientemente de donde se viva, y ese es el compromiso del Gobierno de cambiar el modelo en cuanto se pueda".

La negociación se finaliza "en un mes o dos meses"

A preguntas acerca del "incumplimiento" del compromiso de iniciar en julio la negociación, ha afirmado que "la voluntad del Gobierno es cambiar el modelo de financiación una vez pasara las citas electorales correspondientes de 2015, y ése es el compromiso", a lo que ha agregado que esta negociación "no se finaliza en un mes o dos meses".

"Después del verano está la cita electoral de final de año y hay que esperar a que se produzcan las condiciones favorables para abordar esa negociación entre todas las comunidades, pero el compromiso del Gobierno es cambiar el modelo en cuanto se pueda en el menor plazo posible", ha concluido.