Mientras la Audiencia de Alicante ha sentenciado con una condena el proceso al exedil de Alicante Kiko Sánchez, otros exrepresentantes municipales de la ciudad están pendientes de las resoluciones judiciales de sus investigaciones por casos de presunta corrupción. Los exalcaldes de Alicante Luis Díaz Alperi y Sonia Castedo están imputados por un juzgado por las presuntas irregularidades en la tramitación del Plan General de Alicante. Paralelamente, otro juzgado ha imputado a Castedo en otra investigación abierta por el plan Rabasa. En pocos meses, el siguiente exconcejal en sentarse en el banquillo será el anterior responsable del área de Atención Urbana, Andrés Llorens, por las irregularidades en las obras de la Plaza de Magallanes que fue inaugurada antes de que se adjudicaran las obras. El fiscal le pide tres años de cárcel. El caso ya está en la Audiencia de Alicante y le juzgará la misma sala que ahora ha condenado al exedil Kiko Sánchez. J. A. M.
