Podemos y Ciudadanos han irrumpido con fuerza en el tablero político de las Cortes Valencianas, con trece escaños cada uno. Y en lo que coinciden ambos es en la nueva forma de hacer política, una premisa que quieren trasladar desde el primer momento al hemiciclo.

La candidata de Ciudadanos a la Presidencia de la Generalitat, Carolina Punset, tras el hermetismo de la noche del domingo, dio ayer pistas del camino que quiere emprender en esta legislatura. Así, afirmó que llegan a las instituciones no para hacer pactos de gobierno con el resto de fuerzas políticas sino para buscar acuerdos programáticos para «hacer realidad» su programa electoral.

Punset recordó que es la cuarta fuerza en la Comunidad Valenciana, aunque igualada con Podemos, y recalcó que quiere ser «un factor de estabilidad» institucional para evitar «chantajes y presiones por parte de determinados grupos que quieran imponer las reglas del juego».

Ciudadanos no pondrá «palos en la rueda» de ningún gobierno, pero sí apuesta por apuntalar las reformas que defiende y cambiar la forma de hacer política. «No haremos pactos de gobierno, pero queremos que se cumpla nuestro programa», vino a decir Punset, que lo considera el «verdadero contrato con la ciudadanía».

Podemos, por su parte, sigue en la misma línea que ya trazó el domingo por la noche tras conocer los resultados electorales, en los que ha conseguido trece escaños. El candidato a la Presidencia a la Generalitat, Antonio Montiel, se aferra al programa electoral y al «cambio», pero no da pistas sobre si formará parte de un gobierno de izquierdas o simplemente apoyará al PSOE y Compromís.

Montiel no hizo ayer declaraciones y en un comunicado recordó que los diputados de Podemos llevarán a cabo en las Cortes Valencianas «otra forma de hacer política», una premisa que también exigirán al resto de formaciones.