La cúpula socialista, con Ximo Puig a la cabeza, exigirá a su alcaldable en Alicante, el diputado Gabriel Echávarri, que, al menos, ofrezca explicaciones en público y ante los ciudadanos sobre las conexiones entre su equipo de campaña y el PP. La grave crisis del socialismo alicantino se convirtió ayer en la «comidilla» de todos los foros del PSPV y en un quebradero de cabeza para el candidato a la Generalitat, Ximo Puig, que hoy se arremangará para afrontar el problema después de pasar toda la semana en Madrid para atender sus responsabilidades en la ejecutiva federal de Pedro Sánchez. Echávarri y Puig todavía no se han sentado a hablar aunque es probable que hoy mismo sí mantengan una conversación aprovechando que el secretario general del PSPV acompaña al mencionado Pedro Sánchez a una asamblea abierta con simpatizantes en la capital alicantina.
A pesar de que este periódico viene informando de las conexiones entre el equipo de campaña del PSPV en Alicante y antiguos colaboradores del PP desde el pasado lunes cuando la ejecutiva se reunió para poner en marcha el comité electoral, lo cierto es que en Blanqueries las alarmas no se encendieron hasta ayer cuando se desvelaron los tuits de un exconcejal popular y ahora «refuerzo» socialista en los que alababa a Castedo y Camps; y, además, el tercer caso de un miembro del comité ligado en su día al PP. La dirección del PSPV ni siquiera conocía, como apuntaron fuentes de la formación, que Gabriel Echávarri tenía intención de poner en marcha ya su comité electoral.
La cúpula de los socialistas valencianos, además de cuestionar la puesta en marcha de un equipo de campaña «mastodóntico» y poco operativo con 40 personas, entiende, así se lo trasladarán a Gabriel Echávarri, que el alcaldable socialista en Alicante debe ofrecer explicaciones públicas «especialmente a los ciudadanos» sobre su decisión, aclarar todas las dudas que surjan y, finalmente, tomar las medidas oportunas de forma clara y firme en el caso de aquello que no se pueda justificar. De momento, sin embargo, Gabriel Echávarri se mantiene en silencio. Ni un comunicado público con su voz. Ni tampoco un corte de voz enlatado. Ayer mismo este periódico telefoneó en tres ocasiones -una por teléfono fijo y dos por móvil- al máximo responsable de los socialistas alicantinos para conocer su versión pero no respondió a las llamadas. La secretaría de Organización del PSPV investigará los nombramientos para tomar una decisión.
Hasta ahora, del «núcleo duro» con el que Gabriel Echávarri se enfrentará a la campaña electoral municipal de 2015 han aparecido tres conexiones con el PP. En ese equipo figuran Rafael Gregori, en su día jefe de protocolo del Ayuntamiento de Alicante con Luis Díaz Alperi y durante unos meses con Sonia Castedo; Juan Ravello, exedil popular en La Torre de les Maçanes y autor en 2011 de una serie de tuits en los que, por un lado, jaleaba a Castedo y Camps y, por otro, atacaba a los socialistas; y Germán Iborra, militante durante dos décadas del PP, de baja en los populares desde julio y ahora en puesto de mando con los filas socialistas. Con este panorama, llega hoy a Alicante Pedro Sánchez para participar en una asamblea ciudadana a partir de las 19 horas en el Restaurante Juan XXIII. En Facebook, simpatizantes socialistas apostaban anoche entregar un dossier a Sánchez, con el que Echávarri colaboró en las primarias socialistas, sobre la crisis interna del PSOE.
