El exsenador socialista Ángel Franco ha solicitado su suspensión voluntaria temporal como militante socialista tras aparecer implicado en el sumario de la investigación por el presunto amaño del plan urbanístico de Rabasa a favor del constructor Enrique Ortiz, una trama en la que la Policía le atribuye un papel clave como mediador de una reunión para que la Confederación Hidrográfica del Júcar desbloqueara el proyecto.

Franco, que ha movido los hilos del socialismo alicantino durante los últimos 25 años y cuyos partidarios aún conservan el control de la agrupación local de Alicante, tenía una estrecha relación con Enrique Ortiz, como se desprende de las conversaciones en las que el constructor le lanza elogios e, incluso, hablan de cuestiones internas del partido.

La decisión, confirmada por fuentes de la ejecutiva socialista, se habría precipitado después de que la dirección del PSPV tuviera ya tomada la decisión de abrirle un expediente informativo.

COMUNICADO DEL PSPV-PSOE

Reproducimos a continuación el comunicado emitido por el PSOE de Alicante:

El secretario general del PSPV-PSOE de Alicante, Gabriel Echávarri, ha trasladado esta mañana a la dirección del PSPV-PSOE que el militante de la agrupación socialista de Alicante, Ángel Franco, ha pedido voluntariamente la suspensión temporal de militancia, hasta que se clarifiquen las informaciones aparecidas en prensa.

Echávarri ha recordado que el "elemento esencial de la trama del caso Rabasa no es ningún militante socialista, es la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo. El caso Rabasa es el caso PP". El secretario general de los socialistas alicantinos ha recalcado que "ningún cargo socialista, ni actual ni pasado, está imputado en este caso".

"Mi compromiso y el de mi partido en la lucha por la transparencia es total y real frente a un Partido Popular inmóvil, que permite que la alcaldesa sume imputaciones por cinco delitos graves de corrupción y que, además, siga adjudicando contratos y obras al también imputado Enrique Ortiz. Nuestra ética, decencia y dignidad no es comparable a la del Partido Popular", ha reiterado.

XIMO PUIG

Por su parte, el secretario general del PSPV-PSOE Ximo Puig ha manifestado, a preguntas de los periodistas sobre la situación de Franco, que los socialistas abogan porque no sean los juzgados los que tengan que tomar decisiones respecto a las responsabilidades políticas.

Puig ha añadido a este respecto que el partido "ha tomado las decisiones oportunas", y espera que al final del proceso judicial "cada persona y su nombre quede lo más limpio posible".

"El caso Brugal es el caso PP, el caso Castedo, pero el caso PP como lo es Gürtel, Nóos o Emarsa, que están siendo una losa tremenda para la recuperación económica, social y moral de la sociedad valenciana", ha lamentado.

"En estos momentos quien está interpelando es quien tiene la responsabilidad" ha añadido en referencia a la alcaldesa de Alicante, y ha criticado que el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, "espere siempre a que el juez le haga su trabajo porque no tiene ninguna convicción ética respecto a la lucha contra la corrupción".

Puig ha concluido que es necesaria una relación "diferente" entre políticos y empresarios, ya que considera que aunque "hay que tener un diálogo permanente, hay fronteras que no se pueden cruzar y hay que ir a una ejemplariedad mucho más contundente".