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Julián López

«La Generalitat no es viable sin un cambio en el modelo de financiación»

«La Generalitat no es viable sin un cambio en el modelo de financiación»

Julián López (Albacete, 1971) se ha convertido en uno de los azotes del conseller de Hacienda, Juan Carlos Moragues. El parlamentario socialista, afiliado al partido en la ciudad de Alicante, proclama que Fabra «ha fracasado» en su intento de mejorar la financiación de la Comunidad; considera evidente que la Generalitat ha «despilfarrado» el dinero durante los 19 años de gobiernos del PP; y descarta que el PSPV pacte antes de las elecciones locales con otros partidos de izquierdas.

Abonos a empresas de toros, hogueras, entrenadores personales, Intereconomía... ¿El plan de pago a proveedores del Gobierno se creó para eso?

Los mecanismos de rescate que puso en marcha el Gobierno de España no se crearon para pagar estos gastos, sino para atender deudas prioritarias, que comprometían el mantenimiento de los servicios públicos. El problema no es si se han usado bien o no. Lo que cuestionamos son las decisiones que llevaron a realizar gastos que no eran necesarios, como los contratos con el entrenador de Aznar o la contratación de programas de Canal 9 con Intereconomía, que hubo que pagar recurriendo a préstamos del Estado que tendrían que haberse destinado a gastos más necesarios que llevaban años pendientes. Había tantas facturas pendientes, muchas sin contabilizar, completamente ocultas y al margen del circuito del control administrativo, que cuando se pusieron en marcha los préstamos estatales se decidió mandar el mayor número posible de facturas. Pero esta excusa no nos vale. Se debió haber controlado cada euro y cada factura que se pagaba con dinero público. Y si se pagaron gastos innecesarios mientras se dejaban sin pagar otros más importantes, tan responsable es Fabra como Montoro. El primero, por enviar las facturas, y el segundo, por pagar todo lo que se le enviaba, sin establecer el más mínimo control.

El Gobierno ha anunciado ya que no habrá más planes para pagar a los proveedores. ¿Cree que se recrudecerán los impagos?

Con los préstamos del Estado se han liquidado muchas deudas con proveedores que estaban pendientes, pero la Generalitat está más endeudada que nunca, porque solo se han convertido esas deudas en deuda financiera. El Estado es nuestro principal acreedor. Más de la mitad de las deudas que tiene la Generalitat son con el Estado. Y se produce así la paradoja de que mientras la Comunidad lleva años acumulando una deuda histórica frente al Estado por el hecho de éste ha financiado a la Comunidad por debajo de la media, el Estado se ha convertido en nuestro principal acreedor. Esta situación es insostenible. Lo que a nosotros se nos presta, con los correspondientes intereses, y que tenemos que devolver, a otras comunidades se les da, libre de intereses y sin obligación de devolución, a través del modelo de financiación. En estas circunstancias, la Generalitat no es viable. Si no hay una reforma del modelo de financiación, que incluya la liquidación de la deuda histórica con cargo a los préstamos que nos ha dado el Estado, los impagos volverán.

Alberto Fabra da por hecho ya que no habrá nuevo modelo de financiación a corto plazo y sigue fiando el cumplimiento del déficit a una inyección de 1.000 millones del Gobierno o a que se condonen intereses del rescate. ¿Ve factibles esas medidas?

Fabra ha fracasado. Primero nos aseguró que el modelo se reformaría en 2013 para que entrase en vigor en 2014. Fracaso. Después nos dijo que se reformaría en 2014 y que la reforma se aplicaría con carácter retroactivo a 1 de enero. Fracaso. Todavía me acuerdo de las risas del ministro cuando un periodista le planteó esta posibilidad en una rueda de prensa. Más tarde afirmó que se reformaría en 2014 para que entrase en vigor en 2015, y que mientras tanto recibiríamos una compensación. Tampoco va a ocurrir. ¡Es que no ha dado una! Ahora se conforma con una ayuda transitoria, que le sirva para cuadrar las cuentas de aquí a las elecciones, y después ya se verá. Lo que Fabra plantea no es una solución definitiva a los problemas de financiación de la Generalitat, solo es una fórmula transitoria para ir tirando hasta las elecciones. Y parece que Rajoy le va a poner problemas hasta con eso. El PP valenciano se ha convertido en la oveja negra del partido y los que más vamos a sufrirlo somos los valencianos.

¿Qué ha ocurrido para que la Comunidad arrastre tantos problemas financieros?

Ha habido, eso está claro, una problema de infrafinanciación, que viene desde los 80, cuando se transfirieron las competencias en sanidad y educación. Pero también ha habido mala gestión. El despilfarro siempre es negativo, pero es peor cuando el dinero escasea. Solo interesaba la foto, y a la vez se dejaba espacio para que unos cuantos aprovechados hicieran negocio privado, no siempre limpio. Se favoreció la economía del compadreo, no se apostó por el talento, ni por la innovación. Y Fabra, a veces, aún se atreve a afirmar que en los años de bonanza todo el mundo cometió excesos. Es como si el conductor de un vehículo se emborracha, tiene un accidente y después les echa la culpa a sus acompañantes, que no conducían.

Antonio Torres descartó el martes que el PSPV pueda concurrir a las elecciones con otros partidos. Si el PP finalmente aprueba la reforma electoral y la elección directa de alcaldes, ¿no sería más sensato acudir a los comicios con otros partidos de ideología parecida al suyo?

Bueno, primero habrá que ver si esa reforma se aprueba, con qué características, y cuál es la reacción ciudadana. Que el PP quiera cambiar las reglas del juego vigentes desde el inicio de la democracia por su propio interés... La gente no lo va a digerir bien. En cualquier caso, el PSPV es un partido con vocación mayoritaria. No veo necesario pactar a priori. Si la ciudadanía decide en las urnas que tiene que haber pactos, entonces ya veremos.

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