Distintos dirigentes del comercio alicantino mantuvieron ayer una cena con el expresidente del Colectivo de Comerciantes por Alicante Pedro de Gea después de que su nombre haya salido a la luz pública recientemente por una conversación telefónica entre la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, y el constructor Enrique Ortiz. De acuerdo con las grabaciones policiales, la primera edil maniobró con el también ex propietario del Hércules para tratar de apartar a De Gea de la presidencia del Colectivo de Comerciantes por Alicante. Castedo le preguntó a Ortiz si podía hacerle un hueco en el consejo del club deportivo sin remuneración ninguna con el fin de que renunciara a su cargo en el colectivo y desactivara así sus duras críticas contra la implantación de la multinacional sueca Ikea en Alicante. Los comerciantes quisieron mostrar ayer su unión días después de que el Consell haya aprobado el ATE de Ikea, muy criticado por algunos de ellos. Al encuentro también asistieron el concejal del PP en Alicante Juan Zaragoza y el exedil popular Antonio Sobrino. A. F.