Sesenta y un entidades, el 17 % (20 % el año anterior), no presentó sus cuentas en el plazo preceptivo, censura el Síndic, Rafael Vicente. De éstas, 31 eran ayuntamientos, que no entregaron su información contable al auditor público o lo hicieron una vez cerrado el plazo para su inclusión en la Cuenta General (31 de diciembre de 2013), una situación que el responsable de la Sindicatura no duda en calificar de «muy grave». El informe hace especial énfasis en la no presentación de las cuentas por parte de ayuntamientos de más de 20.000 habitantes, señalando los casos de Alboraia, La Vila Joiosa y Orihuela, así como los de Sueca y Sant Joan d'Alacant, que lo hicieron con posterioridad al 31 de diciembre pasado. En la «lista negra» también hay municipios como La Pobla de Farnals, Ademuz, Rafelbunyol, Sant Mateu, Bigastro y Beniarrés.
El Síndic es contundente a la hora de solicitar a la Generalitat que «haga uso de la facultad que le otorga la ley de Régimen Local y establezca como requisito para la concesión de subvenciones y ayudas la presentación de la Cuenta General, debidamente aprobada, a la Sindicatura de Comptes».
Fuera del plazo legal, aunque antes del cierre del informe, entregaron sus cuentas municipios como Moncada, Aldaia o Picanya, y consorcios como el de Gestión Palacio de Congresos de Valencia. El titular del órgano fiscalizador también alerta de que el 77 % de las entidades locales que presentó sus cuentas no aprobó el presupuesto en el plazo legal establecido.
