El entorno del exconseller aseguró por la mañana que Blasco presentaría la renuncia al escaño «de forma inmediata», pero el registro de las Cortes cerró finalmente por la tarde sin que el exconseller llegara a formalizar la dimisión como diputado no adscrito. La renuncia daría paso a la siguiente en la lista del PP por Valencia, Amparo Sancho, quien ya fue diputada en legislaturas anteriores. La condena provocó una conmoción en la Cámara, que celebraba pleno. La diputadas denunciantes, Clara Tirado (PSPV) y Mireia Mollà (Compromís), se fundieron un abrazo en los pasillos. Tanto ellas como Albiol (que lucía una camiseta con el mensaje «#justiciacasoblasco») acusaron al PP de haber «amparado» y «protegido» al exportavoz popular. Tirado exigió al presidente Fabra que «limpie» el Partido Popular porque con este fallo se demuestra, sostuvo, que «la línea roja no existe en el PP». «Hoy se ha hecho justicia», proclamó Mollà, tras recordar que sufrieron «incluso amenazas de Blasco, que nos llevó ante los tribunales». «Blasco no es un delincuente común, sino pieza clave de la política valenciana durante los últimos 20 años», aseveró Albiol. j. g. g.
