La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha reconocido hoy que su partido ha sufrido una pérdida "tremenda" de votos en la ciudad, pero ha advertido: "No me tengo por una ratita política y voy a ir en el barco hasta que se hunda y el barco no se va a hundir".

En declaraciones a los periodistas, ha explicado que ha recibido el mensaje" de sus votantes en las elecciones europeas del domingo, cuyos resultados no les gustan pero los "asume con responsabilidad" y no cambian su hoja de ruta personal.

"En el momento más difícil, como es ahora, no voy a salir -ha manifestado-. Es precisamente ahora cuando no voy a dejarlo. No me tengo por una ratita política y voy a ir en el barco hasta que se hunda y el barco no se va a hundir".

En su opinión, extrapolar los resultados de estos comicios a las elecciones nacionales, autonómicas y locales puede ser "especulativo" pero es "un disparate" e "inútil", porque tienen una naturaleza y disposición del electorado "distinta" y se basan en una ley electoral diferente.

Además, ha advertido a la sociedad sobre el crecimiento de "grupúsculos radicales, anticonstitucionales, antisistema, procatalanistas y que apoyan las dictaduras de izquierdas", y ha lamentado "no tener un PSOE fuerte" porque España necesita "un PSOE fuerte y responsable y no al albur de las radicalidades".

"Aunque no nos gustan los resultados, hay una evidencia que no podemos tapar ni disfrazar ni esconder y lo digo con toda tranquilidad: en Valencia el partido más votado ha sido el PP; ha ganado aunque con una pérdida tremenda de votos", ha asegurado tras explicar que ya avisó de que no acudiría a la noche electoral.

Según los datos que ha ofrecido, "la ciudad se pinta de azul, salvo en los poblados del oeste", donde han perdido por 72 votos, y ha ganado, aunque sin mayoría absoluta, en las tres mesas del Cabanyal.

Barberá ha señalado que ya ha mandado a algunos concejales a hacer una "reflexión seria" sobre los resultados "distrito por distrito y mesa por mesa para buscar una explicación" porque, aunque la pérdida "no es exclusiva de Valencia", puede haber alguna "causa singular" en la ciudad y eso es lo que tienen que averiguar.

"Asumo el resultado con responsabilidad y lo vamos a estudiar a fondo para explicarles a los valencianos lo que ha ocurrido, ver dónde les hemos fallado y recuperar su confianza", ha agregado.

Barberá ha tachado las declaraciones del portavoz socialista en la ciudad, Joan Calabuig, de "frívolas e irresponsables" ante la "gran debacle" socialista y ha asegurado que el PSOE "es el único que no puede decir que ha ganado algo".

"Con la pérdida de votos absolutamente clara y habiendo recibido el mensaje, al menos podemos decir que el PP ha ganado las elecciones. De Izquierda Unida a la izquierda, todos han subido y el PSOE no puede decir nada", ha afirmado.

Ante el crecimiento de la "izquierda radical" y su pérdida de 60.000 votos, Barberá cree que los socialistas deberían ser "más responsables y realistas".

Barberá ha incidido en que cuando advierte frente a los radicales se refiere especialmente a "las dictaduras de izquierdas como Podemos" o a los jóvenes de Compromís, y ha pedido a la sociedad que analice "bien" los resultados "desde la perspectiva de qué país y qué ciudad quiere".

"Yo quiero una España libre, democrática, de progreso de las personas por sus méritos y capacidades, con bienestar social, estabilidad política, seguridad jurídica y no quiero discordia, quiero concordia", ha afirmado.

Preguntada por su valoración de la aplicación de la línea roja contra la corrupción, ha asegurado que no iba a "entrar en temas de partido y decisiones que ha tomado el presidente", pero ha señalado que, ella no es "juez ni fiscal" pero que la imputación es "una garantía para que el implicado pueda ir acompañada de un abogado".