Las elecciones europeas sirvieron ayer para certificar el avance de los minoritarios en Elche, con un claro voto de castigo que acabó penalizado al PP y al PSOE. El Partido Popular volvió a ser la fuerza más votada, pero perdió 15 puntos respecto a la consulta municipal de 2011. Sólo consiguió 21.411 papeletas, lo que se traduce en el 28,35%. De hecho, son los peores datos conseguidos por los populares desde las europeas de 1989, cuando llegaron al 19,26%. El PSOE no salió mejor parado, y, pese al hundimiento del PP, tampoco se libró del batacazo. Acabó retrocediendo 13 puntos con relación a 2011, y se quedó en 18.544 sufragios y el 24,55%, cosechando así los peores resultados de su historia en una consulta europea. Podemos se convirtió en la tercera fuerza más votada, con 8.671 votos y el 11,48%; seguida de UPyD, con 7.167 y un 9,49%; y EUPV, con 6.217 y un 8,23%. Ciudadanos, Primavera Europea -la marca con la que se presentaba Compromís- y Vox quedaron muy lejos de los grandes triunfadores del 25-M en Elche.
Con estos puntos de partida, y de extrapolarse estos guarismos a unas elecciones municipales, la fotografía del Ayuntamiento daría un giro copernicano. Es cierto que la abstención se situó ayer en el 53,99%, lejos, muy lejos, de lo que es habitual en unas municipales; en esta consulta no concurría el Partido de Elche que, a día de hoy, tiene un edil en el Ayuntamiento; los partidos se benefician en citas como ésta de la proyección mediática de sus líderes nacionales y habrá que ver quién se presenta a nivel local; y aún faltan doce meses para la consulta que decida el destino del bastón de mando ilicitano, y es tiempo más que suficiente para que pueda haber otro vuelco. Sin embargo, los resultados de anoche pueden dar una pista de por dónde va la tendencia.
De mantenerse el mapa que diseñaron las urnas ayer, el PP perdería la mayoría absoluta y de catorce regidores pasaría a diez. El PSOE también se dejaría por el camino otros cuatro concejales y de los doce actuales se quedaría en ocho. Como contrapartida, Podemos, UPyD y EUPV conseguirían representación municipal, y tendrían la llave de gobierno. En este sentido, el grupo de Pablo Iglesias se convertiría en la tercera fuerza más votada y conseguiría cuatro concejales; seguido del de Rosa Díez, con tres; y de EUPV, con dos. Así las cosas, sería el Ayuntamiento más plural de la etapa democrática, con cinco partidos.
De repetirse en mayo de 2015 estos resultados, podrían abrir la puerta a un tripartito, e incluso a un Gobierno a cuatro. Podemos y EUPV, como fuerzas de izquierda, podrían acabar pactando con el PSOE, y sería suficiente para gobernar, ya que con catorce ediles se harían con la mayoría. Otra cosa es qué pasará con UPyD en Elche. A estas alturas, nadie tiene muy claro ni en un lado ni en otro con quién se iría el partido coordinado en la ciudad por Marisol Coves, si con los populares o con los socialistas, y ello pese a que anoche en determinados círculos políticos atribuían la subida de la formación magenta a los votos descontentos del PP.
Estos datos demuestran que, al final, la ciudad tampoco ha sido ajena al varapalo al bipartidismo y a la irrupción de Podemos en la escena. Sin embargo, la guerra interna y la lucha de poder que se ha abierto en el PSOE, de un lado, y algunas polémicas decisiones del actual equipo de gobierno, de otro, también podrían haber tenido efectos en estos resultados.
Lo único claro por el momento es que el PP y el PSOE han recibido un jarro de agua fría, mientras los pequeños ganan terreno. Las europeas han acabado, la cuenta atrás para las municipales empieza. Ahora habrá que ver qué ocurre dentro de un año. La precampaña prácticamente ha empezado.
