En su primera declaración, el 1 de febrero, Camps zanjó 43 preguntas con la respuesta evasiva tipo «no me consta» y «no recuerdo». Preguntado ayer por si había recuperado la memoria, el expresidente contestó: «La memoria nunca la he perdido gracias a Dios, pero las cosas que no se recuerdan es muy difícil recordarlas». Evidenció en este punto que sus explicaciones siguen adoleciendo de ciertas carencias de espíritu didáctico, si bien parece políticamente menos encerrado en sí mismo y más a la ofensiva, en comparación con los últimos meses. Por su parte, durante una visita a Alicante, Serafín Castellano dejó claro que, pese al proyecto de ley de Gallardón, Fabra aplicará su línea roja y excluirá a los imputados de las candidaturas. «Hay una línea que ha marcado el presidente y no hay nada que añadir. El presidente es el que marca las directrices», aseveró Castellano. f. a./J. A. m.