Los segundos con más déficit, solo por detrás de Murcia. El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, certificó ayer que la Comunidad Valenciana incumplió el objetivo fijado para 2013 y cerró el ejercicio con un desfase presupuestario del 2,33 % de su Producto Interior Bruto (PIB). A priori, la Generalitat estaba facultada para desviarse un máximo de un 1,6 %. El Gobierno central atendió las reivindicaciones del Ejecutivo de Alberto Fabra, acordó un déficit asimétrico para cada autonomía y concedió al Consell el tope más alto de toda España. Pero ni aún así. La Comunidad se desvió en un 0,73 % extra y gastó cerca de 710 millones más de lo marcado. ¿Qué ocurrirá ahora? Lo mismo que los últimos años: tocará hacer más recortes.

El Ministerio de Hacienda obligará a la Generalitat a elaborar su enésimo plan de ajuste de los últimos años y en él se deberán plasmar tanto los tijeretazos que prevé el Ejecutivo como su previsión de aumento de ingresos. El conseller de Hacienda, Juan Carlos Moragues, abogó ayer por esta última opción. En una comparecencia pública en Valencia para analizar los «números rojos» del pasado año, el titular de las finanzas autonómicas consideró «positiva» la cifra de déficit, destacó el «esfuerzo» de la Generalitat para contener su desfase presupuestario e insistió, tal y como ya ha adelantado Alberto Fabra, en que la época de tijeretazos ha tocado a su fin en la Comunidad. El plan de ajuste, por ende, se centrará en el aumento de ingresos. O, lo que es lo mismo, Moragues fía las cuentas a la recuperación económica. Alcanzar ese objetivo, no obstante, se antoja sumamente complicado. Entre otros motivos, porque el Consell deberá conseguir un ahorro cercano a los 1.000 millones de euros. Deberá cubrir los 710 millones que gastó de más el pasado año y, además, tendrá que cerrar 2014 con un déficit máximo autorizado del 1 %, frente al 1,3 % que disponía para 2013 cuando confeccionó las cuentas, pero que posteriormente fue ampliado hasta el 1,6 %. El conseller, con todo, dio por hecho que será imposible quedarse por debajo de esa cifra si el Gobierno no mejora la financiación con carácter retroactivo al 1 de enero de 2014 o, en su defecto, habilita un fondo de compensación para las autonomías en apuros.

Pese a todos estos datos, Moragues quiso sacar pecho. Afirmó que la Comunidad es la autonomía que más ha reducido su déficit y recordó que el Ejecutivo ha conseguido rebajar sus números rojos en 2.845 millones en apenas dos años. Se ha pasado de un desfase del 5,15 % en 2011 a uno del 2,33 % el pasado ejercicio. «La Comunidad es la que mayor esfuerzo ha realizado de todas las autonomías», sintetizó.

Durante su comparecencia, Moragues también ofreció un dato revelador. El pasado año por estas fechas, el Ministerio de Hacienda constató que el déficit de la Comunidad fue del 3,45 % del PIB. Pero ayer, sin embargo, el conseller elevó ese guarismo hasta el 3,94 %. ¿Por qué? Básicamente, por dos motivos. El primero, la caída del PIB de la Comunidad. La crisis ha golpeado especialmente a las comarcas valencianas y su Producto Interior Bruto ha ido disminuyendo a lo largo de los últimos años. Esa caída ha repercutido en el porcentaje de déficit y lo ha disparado hasta el 3,69 %. El 0,25 % restante procede de las ayudas a la vivienda. Aunque a regañadientes, el conseller admitió ayer, a preguntas de los periodistas, que el Ejecutivo ha decidido incluir en las cuentas de 2012 esos impagos en las subvenciones por valor de unos 240 millones. Tomando como referencia esa cifra, la reducción de un año a otro alcanza los 1.579 millones. La mitad de todas las autonomías.

El conseller, por último, quiso aclarar que si la Comunidad hubiese estado financiada como la media de España, habría conseguido contener más su desfase presupuestario. «El esfuerzo es todavía mayor si tenemos en cuenta que los gastos financieros han crecido en 207,11 millones en la Comunidad, derivados en su mayor parte de la infrafinanciación que padece nuestra región», concluyó.

Por su parte, el secretario de Estado de Administraciones Púbicas, Antonio Beteta, puso en valor ayer el esfuerzo realizado por la Generalitat, mientras que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, también hizo una valoración global «positiva», aunque admitió que la recuperación «no ha llegado a todos los territorios».