Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

INFORME INTERNO

La Generalitat detecta fallos en el control y rendición de cuentas

El Consell recurre a un selecto grupo de funcionarios para conocer los puntos débiles de la Administración y proponer mejoras

Juan Carlos Moragues y José Císcar, durante una comparecencia. EFE/J. c. Cárdenas

El Consell que preside Alberto Fabra aprobó recientemente un nuevo plan estratégico de innovación y mejora de la Generalitat en el que se recoge una serie de medidas para modernizar y hacer más transparente la gestión pública. El documento incluye también un diagnóstico de la situación actual del que se desprenden conclusiones inquietantes, como la asunción de que existen lagunas en el control y la rendición de cuentas o que el ciudadano considera que la corrupción está generalizada en el ámbito público. Las «amenazas» y «debilidades» detectadas en la Administración valenciana no son fruto de una elucubración, sino consecuencia del análisis realizado por un selecto grupo de funcionarios a los que el Consell ha recurrido para saber qué se cuece en sus alcantarillas.

A través de una técnica denominada Dafo, la Conselleria de Hacienda y Administraciones Públicas -de quien depende el plan estratégico- ha consultado a un grupo de 50 funcionarios para que identifiquen las «fortalezas, debilidades internas; oportunidades y amenazas externas» de la Generalitat. Los funcionarios seleccionados son, según indica la conselleria en su plan, personal de dilatada experiencia en la Generalitat que ha recibido formación especifica sobre gestión de calidad en los servicios públicos.

Se trata de técnicos de todas las consellerias que integran la red de calidad de la Generalitat o personal de recursos humanos. También se ha seleccionado a personal que por las áreas en las que desarrollan su labor tienen conocimiento directo de cómo funcionan los controles internos. Es el caso de los funcionarios y funcionarias de la Inspección General de Servicios, órgano a quien le corresponde velar por el correcto funcionamiento de la Administración.

El resultado, teniendo en cuenta la autoría realizada, no deja de ser preocupante. Así, los funcionarios detectan «insuficientes mecanismos de control y rendición de cuentas», excesivas cargas administrativas y legales, falta de trabajo en equipo, mala distribución del personal en estructuras excesivamente jerarquizadas, etc. La radiografía de la Administración arroja también otras debilidades, como la insuficiente participación ciudadana, la desmotivación del personal, la insuficiente profesionalización de los directivos, así como la alta rotación de los equipos directivos por los cambios de gobierno.

Corrupción y desafección

Las amenazas que estos funcionarios detectan en la Generalitat tampoco son despreciables. La crisis económica, los recortes, los casos de corrupción y la desafección de los ciudadanos hacia la política también podrían pasar factura al Ejecutivo que preside Alberto Fabra. Así, según la opinión de estos funcionarios, los ajustes pueden conllevar una reducción en la prestación de servicios. También se muestran preocupados por la falta de credibilidad en la actuación de los poderes públicos y por la desconfianza en las instituciones por parte de la ciudadanía. En sus respuestas también han señalado el hecho de que exista una generalización de la percepción ciudadana de corrupción en el ámbito público.

Con el objetivo de corregir esta situación, la Conselleria de Hacienda y Administraciones Públicas plantea una serie de medidas que incluyen un plan de calidad e inspección para impulsar mecanismos para «la cercanía, transparencia y rendición de cuentas, favoreciendo la visibilidad de los datos de la gestión pública».

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats