El eco de las anomalías que se dieron en la gestión de Radiotelevisión Valenciana (RTVV), durante más de dos décadas, volvieron a resonar ayer cuando el consejero del ente autonómico a propuesta de Compromís, Rafael Xambó, anunció que el próximo lunes llevará al Fiscal los contratos suscritos entre Canal 9 y dos grupos de comunicación por considerarlos «como mínimo irregulares». Los acuerdos a los que hizo referencia el representante de la coalición suscribieron -entre 2010 y 2012- una colaboración de la televisión pública valenciana con el grupo Vocento y Televisión Popular sobre la utilización del múltiplex de RTVV para sus emisiones en la Comunidad. Xambó obtuvo ayer dichos contratos y, a su juicio, eran muy «favorables» para Vocento ya que le permitían emitir en la región sin necesidad de pagar a Abertis como hacían el resto de cadenas. Además, Xambó denunció la deuda de más de 400.000 euros que ambas emisoras tienen contraída con RTVV y que, todavía, no ha sido saldada. De aquellos barros estos lodos.