La fiebre de transferencias desde la cuenta suiza de Luis Bárcenas a la sociedad Brixco S. A., al mes de que el extesorero del PP Ángel Sanchis Perales supervisara los fondos, no ha pasado inadvertida al juez Pablo Ruz. El instructor de la causa Gürtel y del caso Bárcenas ha imputado a Sanchis porque entiende que su visita al Dredsner Bank de Ginebra para revisar la cuenta fue parte de la colaboración para ocultar fondos y blanquear dinero. La empresa Brixco sería, según el juez Pablo Ruz, la tapadera usada para poner el dinero a salvo de la investigación judicial tras el estallido de Gürtel.

La secuencia de "swifts" bancarios se produjo a partir del 24 de marzo de 2009. A ese primer traspaso le sucedieron otros tres a una cuenta del HSBC de Nueva York a nombre de la empresa que entabló relación con L. B. de la mano de Sanchis, quien puso en contacto a emisor y receptor de los fondos y quien admite tener "intereses" en Brixco. No sólo el juez ha reparado en los envíos. Los traspasos repentinos dispararon las alarmas del Dredsner Bank hasta el punto de que la gestora de la cuenta de Bárcenas exigió referencias de Brixco y de la sociedad Lidmel International S. A., a cuya cuenta también en el HSBC en Nueva York, fueron a parar tres envíos: uno de 200.000 euros y otro de 300.000 euros, ambos del 2 de junio. Y una tercera transferencia de 284.000 dólares, que fue ordenada dos días después.

La responsable de la cuenta del extesorero, Agatha Stimoli, remitió el 29 de julio un correo a Iván Yáñez, el autorizado por Bárcenas para mover su dinero, en el que le pedía toda la documentación que pudiera facilitarle sobre Brixco y Lidmel International. Yáñez le respondió ese mismo día: "Me la están preparando". Los "mecanismos internos de seguridad bancaria" se activaron vistos "los beneficiarios de las últimas transferencias realizadas, destinadas a cuentas de la titularidad de Brixco S. A. y Lidmel International", subraya el informe de la Unidad de Delitos Económicos y Fiscales (UDEF) remitido al juez Ruz. Por eso, añade el documento policial, el banco "decide investigar en referencia a tales sociedades (...) existiendo comunicaciones entre Agatha Stimoli e Iván Yáñez".

El atestado policial observa que Luis Bárcenas e Iván Yáñez, asesor y testaferro, conciertan una cita con el banco para el 26 de agosto de 2009. Un mes después se produce un segundo encuentro, en el que se habla de que las instrucciones sobre la gestión de la cuenta las recibirá el banco de Lombard Odier, que actuará en nombre de la Fundación Sinequanon para que se ejecuten nuevos traspasos a una cuenta de esa misma entidad a nombre de la mercantil Tesedul S. A.

Antes incluso de los traspasos, en el Dredsner Bank cundió el nerviosismo. Se desprende de una comunicación interna del banco en la que se hace constar que la "preocupación es patente". La nota es del 6 de marzo de 2009, justo un mes después de la operación Gürtel ordenada por Garzón. Las noticias del escándalo llegaban a Suiza y el nombre de Luis Bárcenas estaba de por medio.

El banco ya indagó en 2005

En todo caso, ya hacía años que en la sucursal de Ginebra se indagaba sobre el trasiego del dinero de Bárcenas y sobre el origen de los fondos. El extesorero del PP es cliente del Dredsner Bank desde 1990. Su primera cuenta la abrió en una sucursal de esta entidad en Zurich. La cerró en 2001 y abrió otra que, a su vez, fue clausurada en 2005. Entonces puso el dinero -casi 15 millones de euros en esos momentos- a nombre de la citada Fundación Sinequanon.

Fue en ese momento cuando cuando el banco le preguntó por cómo había podido amasar esa fortuna y si tenía relación con su condición de senador del PP. Porque el extesorero no había comunicado que ocupaba el cargo de gerente del partido desde 1991. Cesó en esa responsabilidad en 2008 cuando, en el congreso de la reelección de Mariano Rajoy en Valencia, fue nombrado tesorero. Bárcenas explicó al banco que el origen de los fondos no tenían relación con su cargo político, sino que provenían de su afición a la compraventa de arte y de actividades empresariales, entre otras en el sector inmobiliario.

En el informe interno que realizó en ese 2005 Agatha Stimoli para explicar sus indagaciones sobre los fondos de Luis Bárcenas, la gestora de cuentas trasladó que el dirigente del PP había expresado su malestar por la petición de explicaciones del Dredsner Bank.