Soy un fracasado, un vídeo Beta, la cara B de un single. Lo que mejor haces con la boca no es cantar. Anda, que te hace falta un buen polvo. Y a ti un buen bidé. No vences tus problemas porque el problema eres tú. Son frases recogidas del jardín urticante que los miembros de «Gominolas», grupo musical infantil de éxito en los 80 del siglo pasado, se lanzaban como escupitajos al volverse a encontrar 20 años después para ocultar que los cuatro que aún están vivos son desdichados, que su vida es un desastre, que no supieron crecer, y que aún les queda un asomo de esperanza, volverse a juntar. «Gominolas» es una comedia dolorosa en la que reír duele. Detrás de las excelentes interpretaciones de Fernando Tejero, Arturo Valls, Kira Miró, y Gorka Lasaosa, con un reparto muy bien ajustado, entre ellos Lluís Homar, hay un equipo de guionistas excepcionales.

El director, Nacho García Velilla, firma un trabajo vibrante, conmovedor, certero, un retrato agridulce que trasciende los límites de la ficción para arañar fibras en las que nos podemos reconocer. La misma noche La 1 emitió Los niños del Chad, un reportaje que hizo el camino inverso, partió de una realidad dolorosa que avanzaba hacia un delirio en el que parecía intervenir la mano de algún creador de comedias.

Ni el periodista francés Marc Garmirian creo que era consciente, en el momento de grabar la trama que iban montando los iluminados de la ONG El Arca de Zoé para sacar del país a los 103 niños que nos han conmovido, de lo que de verdad estaba ocurriendo ante el objetivo. El reportaje, presentado por Beatriz Ariño, se completó con otros de los periodistas de La 1 en la zona. Yolanda Flores, en Tele 5, estrenó «El Ventilador». Para esparcir la mierda. o