En 1983 era inaugurado el Museo Arqueológico Municipal de Elda y en 1994 incluido en la Red de Museos de la Generalitat Valenciana. El primer y habitual director ha sido el funcionario arqueólogo municipal Antonio Poveda Navarro, que asumió las funciones y servicios propios de un Museo Arqueológico, además de esforzarse por el cumplimiento de la legislación. Un total de 16 puntos de los cuales sólo el último se le es permitido: «Visitas guiadas al Museo e itinerarios históricos urbanos y arqueológicos, al Castillo de Elda, al yacimiento de El Monastil y otros». Pues bien, si la única actividad son las «visitas al museo» se convierte en un espacio infrautilizado, algo que no ocurre en los demás museos municipales como los de Novelda, Petrer, Villena o Alcoy. El actual abandono y nula actividad del Arqueológico de Elda obedece a las decisiones mediante Decreto de Alcaldía y la dejadez y negativa actuación de la concejalía de Patrimonio Histórico desde 2009 con el gobierno del PP. De tal modo que, desde 2010, por imposición del gobierno de la alcaldesa Adela Pedrosa, el Museo está sin prácticamente actividad pública y sin poder cumplir la función cultural y social a la que está obligado.

Pero desde junio de 2015, con el nuevo gobierno de PSOE y Compromís encabezado por Rubén Alfaro, se mantiene la misma situación irregular e irresponsable. Es ilegal e irracional que este centro cultural haya sido vaciado de sus funciones y actividades de siempre y no pueda hacer esas actividades ni otras. Primero por decisión del PP y actualmente por mantener la misma postura el PSOE, así que son sus políticos los responsables de su anulación para la ciudad. Otras obligaciones legales como organizar seminarios, conferencias y exposiciones, también las tiene vetadas el Museo por su edil Amado Navalón.

La paralización e inutilización viene además irracionalmente consolidada cuando en 2010 se crea una innecesaria Sección Municipal de Patrimonio Arqueológico, que no existe en ningún ayuntamiento que cuenta con museo, y que ha venido a suplantar y marginar definitivamente al Arqueológico, cuya mayoría de funciones y actividades ha sido transferida sin ningún motivo a la citada sección.

El problema real es la irresponsabilidad, falta de sensibilidad y gestión por parte de los responsables políticos, que es lo que se quiere ocultar cuando Navalón dice en la prensa que el problema es «la grave dejación de funciones del director del Museo». Entonces, ¿cuál es la razón de todo esto?. Respuesta evidente: cuando el PP supo que Antonio Poveda se movía políticamente y podía ser candidato a la Alcaldía por Compromís, lo persiguió para anularlo públicamente por si ganaba algún voto. Y para ello desmanteló el Museo y se llevo al segundo arqueólogo del mismo, Juan Carlos Márquez, para crear con él una innecesaria Sección Municipal de Arqueología con la que suplantar toda la actividad del Arqueológico, otorgándole presupuesto y todo el apoyo necesario. Osea una «caza de brujas»?.Más indecente es que esto mismo lo esté haciendo el concejal socialista Navalón desde 2015. Pero ahora por partidismo porque la vinculación política y de amistad es pública. Ahora, con Poveda expedientado dos meses, se pretende a toda prisa que Márquez lo arregle todo. La mala fe en este asunto en la Alcaldía y en la concejalía parece evidente, y la oposición municipal ¿se entera o no se quiere enterar?

Por último, un mal político sin argumentos siempre intenta desacreditar y criminalizar al que le es crítico, y eso es lo que se está haciendo con Poveda cuando se dice que «es polémico y ha tenido problemas con todos los ediles». Habrá que recordarles a quienes dicen eso que también ellos han tenido enfrentamientos con Mosaico, la Fundación Paurides o la Asociación Amigos del Castillo de Elda que yo presido, y desde la que declaramos nuestro apoyo total a Antonio Poveda y lamentamos que decisiones meramente políticas estén afectando, de manera tan negativa, el normal desarrollo de los fines culturales de nuestra ciudad. Confiamos que nuestros políticos recapaciten y miren por el bien de nuestro Patrimonio Histórico de una vez por todas? ¡si es que saben hacerlo!