Hablaba Don Quijote a Sancho en el capítulo X de la insigne obra literaria de la existencia de «un bálsamo con el cual no hay que tener temor a la muerte, ni hay que pensar morir de herida alguna; y así, cuando yo le haga y te le dé, no tienes más que hacer sino que cuando vieres que en alguna batalla me han partido por medio del cuerpo, como muchas veces suele acontecer, bonitamente la parte del cuerpo que hubiere caído en el suelo".

El gobierno valenciano nos tiene preparados a los oriolanos varios tarros de este potingue para que, creyéndose ellos ser Don Quijote y nosotros seamos Sancho, lleguemos al convencimiento de que pese a haber estado toda esta legislatura castigando e ignorando a Orihuela y a los oriolanos en los presupuestos de la Generalitat, lleguemos al convencimiento de que han sido espléndidos y poco menos que les debemos el aire que respiramos.

De sobra estamos viendo cómo encaminan sus inversiones a poblaciones afines políticamente al señor Puig y a la señora Oltra y cómo marginan a Orihuela en todas sus actuaciones.

Pero claro, no podía faltar quienes desde dentro de nuestra propia casa les dan la razón, les hacen de altavoz, y procuran boicotear todas las actuaciones que el equipo de gobierno realiza encaminadas a que Orihuela mantenga su liderazgo y su peso político y económico.

Si vemos las declaraciones de los miembros del grupo municipal socialista realizadas desde el comienzo de esta legislatura podremos observar cómo se han centrado únicamente en dinamitar cualquier iniciativa que se quisiera poner en marcha.

Hace unos días Carolina Gracia criticaba que se hubiesen repartido 51.000 euros en pago de productividades a diversos funcionarios por la consecución de varios objetivos; no mostrando la menor vergüenza por enseñar públicamente una cifra que en nada se parece a los más de 280.000 euros que su compañero de partido Víctor Ruiz repartió, sin ir más lejos, durante el ejercicio 2014. Hace falta carecer de cualquier pudor para aparecer ante los medios denunciando lo que uno mismo ha hecho multiplicado por seis.

También pudimos ver en su día cómo criticaban el contrato de la ORA, aquél que nos hizo perder cientos de miles de euros por su nefasta gestión, ya que recordarán todos que durante la etapa del gobierno socialista, la empresa se llevaba todo lo que recaudaba sin ingresar nada al Ayuntamiento.

Hasta no hace mucho comprobábamos cómo criticaban nuestra gestión en el servicio de Atención Temprana, y hasta su encomienda a una de las sociedades municipales. Mientras que se podría calificar de gigante el conflicto que los socialistas generaron en la anterior legislatura con esta cuestión por su falta de rigor y profesionalidad.

Hemos visto cómo criticaban el contrato de la limpieza de edificios, sin tener en cuenta que ellos mismos fueron totalmente incapaces de sacarlo adelante. Y todo, todo, en general ha sido criticado, aunque Orihuela saliese beneficiada.

No sé si es cierto eso que dicen de que la mejor defensa es un buen ataque, pero lo que sí es verdad es que el PSOE es muy dado a esta práctica: critican los Presupuestos Generales del Estado, necesarios para que el país siga, como hasta ahora, creciendo, recuperándose de la crisis y creando empleo; y critican la subida de las pensiones, olvidándose de que Zapatero y su gobierno nos llevaban de cabeza a una reducción como las que se produjeron en Grecia o Portugal.

Señoras y señores, para conquistar a Orihuela olvídense del bálsamo de Fierabrás. Traigan inversiones y traigan la carretera a la costa o quédense en València a seguir tirando balones fuera e intentando despistar. Todo se andará.