Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Twitter se blinda contra los abusos

Twitter saca la artillería contra la violencia y los mensajes de odio en su plataforma. La red social de "microblogging" (mensajes cortos) quiere desvincular su nombre de los movimientos de extrema derecha que utilizan su plataforma para difundir mensajes radicales o de los "trolls" que desatan toda su ira en la red social contra personajes públicos. Estos escenarios están a punto de cambiar porque Twitter tiene desde este lunes la potestad para bloquear y eliminar las cuentas de quienes empañen su nombre. "No se podrán hacer amenazas de violencia específicas ni expresar el deseo de que una persona o un grupo de personas sufran daños físicos, enfermedades o la muerte. Esto incluye, entre otras cosas, amenazar con actos de terrorismo o promoverlo". Así explica Twitter en su blog el nuevo rumbo que toma la compañía. Parece que, esta vez, la cosa va en serio y las medidas tomadas en esta ocasión distan mucho de lo ocurrido en febrero, cuando la red social anunció una serie de cambios pero ninguno pasaba por cortar de raíz la actividad de los autores de algún tipo de abuso. Esta vez, sí se hará. Los cambios de Twitter comienzan por lo más básico: el perfil del usuario. El nombre o la foto no podrá contener símbolos de odio o términos abusivos. Con este movimiento Twitter le da una vuelta a aquello de eliminar el famoso huevo de Twitter para terminar con los "trolls", una medida que tomó en abril para erradicar aquellos perfiles sin una imagen identificativa. Una decisión que resultó inútil: el odio y los "trolls" seguían ahí, aunque con otro aspecto. En esta ocasión, toda persona que difunda, ensalce o justifique actos de violencia o abusos podrá ser eliminada de la red social. Sin paliativos. Será Twitter quién decida si existe un motivo para bloquear a un usuario y para ello también analizará la actividad y declaraciones del denunciado, dentro y fuera de la plataforma. La nueva normativa también pretende frenar los casos de "bullyng" y controlar los casos de abusos de índole sexual a través de la plataforma. "No puedes comportarte de forma abusiva hacia otra persona enviándole contenido sexual no deseado, cosificándola sexualmente o adoptando otros comportamientos sexuales inapropiados", dice el comunicado. Para que el engranaje de la nueva mecánica funcione el usuario es la clave a la hora de denunciar los actos vejatorios de los que sea objeto o testigo. Una fórmula que también adoptó Facebook en su día cuando la sombra de las "fake news" y los mensajes de odio oscurecían su hegemonía en el mundo de las redes sociales. A mediados de año la red social de Mark Zuckerberg se comprometió a borrar todo el contenido racista o intolerante, contrató a 4.500 empleados para revisar las publicaciones y pidió a los usuarios su colaboración para denunciar. La historia se repite pero en esta ocasión dentro del espacio aé- reo del pajarito de Twitter, un medio etéreo plagado de "trolls".

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats