Allá por el año 2007 Fernando Morales, entonces alcalde de San Isidro, colocaba en el vocabulario de esta comarca las palabras «Zona de Actividad Logística (ZAL)» y «Puerto Seco». Con la referencia del Polígono la Granadina, mucho antes que el Corredor Mediterráneo se declarase vía prioritaria de alta velocidad, anticipaba una estrategia de competitividad y diversificación económica para la Vega Baja a través del transporte ferroviario de mercancías.

Consciente de la necesidad de plasmar esta intuición en el mapa logístico de la Comunitat Valenciana reclamó un estudio para defender la ubicación de la infraestructura. Recurrió, sin éxito, al Consorcio Desarrollo Económico Vega Baja (Convega); apenas declaraciones institucionales de apoyo -Diputación Alicante 2009- y la realidad de su ausencia en el Plan de Infraestructuras Valencianas 2010/2020 de la Conselleria; incluso en el 2013 se condicionó esta ZAL a la financiación privada para su desarrollo. En este periplo por fin una luz, el nodo logístico de la Vega Baja aparece en la estrategia del Ministerio de Fomento 2013 y el Corredor Mediterráneo se declara red transeuropea prioritaria en el transporte de mercancías.

En 2015 los ayuntamientos de Albatera, Granja Rocamora, Cox, Callosa de Segura, San Isidro y Catral, con la complicidad de la asociación empresarios Asemvega y sindicatos, retoman el proyecto y financian un estudio de viabilidad económico, social y medioambiental elaborado por la Universidad Alicante (UA) al objeto de solicitar fondos europeos para su construcción. El estudio ve la luz en octubre 2016; con una inversión pública estimada de 24,3 millones de euros y una viabilidad social de 187,5 millones de euros el proyecto muta su concepción inicial de ZAL a Intercambiador carretera/ferrocarril ganando eficiencia y aprovechamiento de suelo industrial de los polígonos ubicados en el radio de la localización San Isidro. La zona de influencia se amplía, la comarca da paso a la referencia «Sur Comunitat Valenciana, manufactura del Vinalopó y hortofrutícola Vega Baja».

Pretendiendo optar al programa «Conectar Europa» en enero 2017 se celebra en el Ministerio Fomento una reunión técnica y en Conselleria de Obras Públicas y Vertebración del Territorio (Conselleria) alcaldes y empresarios se reúnen con la consellera María José Salvador y Carlos Domingo, director general Transporte. Ministerio y Conselleria apuntan la necesidad de definir la viabilidad del modelo de negocio del intercambiador, estudio que a petición de municipios y empresarios financia la Diputación y realiza también la UA. Conclusión: el modelo es rentable para un operador logístico internacional con tres premisas: uso de contenedores, tren completo punto a punto e inversión pública y gestión privada.

En noviembre 2017 en el Ministerio Fomento, Manuel Niño subsecretario de infraestructuras, traslada la disposición y las condiciones de apoyo al proyecto. Primero, la inclusión del nodo ferroviario en el protocolo Ministerio de Fomento/Generalitat Valenciana, el último protocolo data del 2014; segundo, un análisis de viabilidad completo del proyecto donde la Generalitat se responsabilice del estudio de demanda y encaje territorial del nodo, y el Ministerio de Fomento del estudio técnico funcional. Por último la explotación futura debe ser viable económicamente. En enero 2018 se trasladará a Conselleria la inclusión del intercambiador Sur como nodo de la red de la Generalitat Valenciana en el marco del Estudio del Sector Logístico de la Comunitat; la Generalitat evaluará el proyecto del nodo, tal como indicaba el Ministerio Fomento, como futuro líder e inversor principal en el impulso del intercambiador para su cofinanciación autonómica y europea.

Los ayuntamientos no podemos generar empleo de manera significativa, pero si podemos generar las condiciones para que se produzca. El intercambiador cuenta con implicación municipal y de la sociedad civil, apoyo empresarial palpable, respaldo académico de la Universidad Alicante y predisposición manifiesta en los niveles de decisión local, autonómica y nacional. Es la hora de establecer sinergias. El Sur también existe.