La Banda Sinfónica Municipal de Alicante ofreció el pasado sábado en el Teatre Calderón un concierto en homenaje a la Societat Música Nova d'Alcoi, la cual está celebrando su 175 Aniversario, actuación que tuvo como presentadora a Maribel Vicedo, miembro de la entidad alcoyana, estando presentes el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Alicante Daniel Simón y el Alcalde de Alcoy Antonio Francés, entre otras autoridades. Es poco habitual que una banda municipal se desplace fuera de su ciudad para una actuación, por lo que el concierto de esta agrupación profesional puede calificarse como de excepcional, no sólo por el desplazamiento en sí, sino también por la brillantez interpretativa de la que hizo gala. Fue un homenaje a la Nova y también a Alcoy, representado en esta ocasión por sus compositores más ilustres de tres generaciones distintas: Juan Cantó (1856-1903), de quien se interpretó un vibrante «Andante y Polonesa»; las descriptivas y seductoras «Escenas Levantinas» de Gonzalo Barrachina (1869-1916); el imperecedero y elegante pasodoble-marcha «Mi Barcelona» de Julio Laporta (1870-1928); la monumental marcha mora «Abencerrajes y Cegríes» del médico-compositor Gonzalo Blanes (1882-1963). Un inciso aquí: jamás entenderé porqué ningún cargo alcoyano (alférez, capitán o incluso escuadras)«sacan» esta descomunal composición en «L'Entrà de Moros»; verdaderamente se debe tener un gusto especial o exquisito para ello. En fin, seguimos. El eterno e inspirado pasodoble «Suspiros del Serpis» de José Carbonell (1890-1957); la paradigmática y excelentemente orquestada obra «Rituals i danses d'Algemesí» de Amando Blanquer (1935-2005), compositor del que se interpretó asimismo la siempre espectacular y representativa marcha mora «Tarde de Abril»; obras todas con alma, algunas, propiedad emocional indiscutible de los alcoyanos, quienes a través de los años las han hecho suyas como emblema musical irrenunciable de una ciudad que vive sus tradiciones como pocas. Así, con emoción y disciplina, lo transmitieron los profesores de la banda alicantina, de la cual forman parte, por oposición, claro, dos directores de la Nova: Pedro Larra Navarrete, saxo alto soprano, que lo fue en 2008, y Juan Doménech Calaforrra, clarinete, que lo es desde 2009, quienes actuaron igualmente como directores en momentos puntuales del concierto. También pudimos ver en uno de los atriles a José Antonio Llinares Igual, clarinetista y actual presidente de la Nova d'Alcoi que dirigió al final el Himno de Fiestas de Barrachina en el año de su centenario. La Banda Sinfónica Municipal de Alicante con su director titular al frente, José Vicente Díaz Alcaina, dio un notable nivel global; con unos cincuenta músicos, la agrupación alcanzó sonoridades muy estimables en todas sus secciones, mostrando sorprendentemente fuerza y uniformidad. Si pueden, no dejen de oírla y verla, generalmente todos los domingos de primavera y verano en su espacio natural, es decir, la entrañable Concha de la Explanada de Alicante.