Diego García, presidente del Elche CF, debe salir a dar explicaciones sobre la compra de los terrenos del anexo que el miércoles oficializó el club y no esperar a la junta de accionistas. Se llama transparencia. Los afines al consejo, el propio Diego García, además de José Luis Maruenda y César Nohales, que han invertido en la operación, podían haber comprado la finca para el Elche y no como un movimiento urbanístico que les beneficie aprovechando que la entidad contaba con el derecho de tanteo sobre ese suelo. En el comunicado afirma que el club ha tenido un beneficio de 400.000 euros, una limosna si nos atenemos al valor que tienen esos terrenos para el Elche y la plusvalía que pueden alcanzar cuando lo revendan. Ahora, deberá explicar el máximo dirigente, ¿qué tanto por ciento esperan recoger ellos? En vez de una operación que beneficie al Elche parece que se han preocupado solo de ellos. Hasta fin de año no pagará el club alquiler, pero a partir de ahí, ¿cuánto le van a cobrar a la entidad? Si lo hubieran comprado para el Elche ese dinero no hacía falta abonarlo. Además, con el dinero del alquiler, se irían pagando los terrenos poco a poco en caso de haber pedido una hipoteca. En suma, una operación más, de las muchas que se han vivido en el club en los últimos años, que han llevado al Elche a una situación que roza la liquidación. Todo lo contrario hacían antes los directivos de esta entidad, que buscaban el beneficio del club y arriesgaban su dinero para ayudarle. Recuerdo a Diego Quiles y Francisco Borja, cuando ficharon a Eloy y Jaume. Pusieron el dinero y cuando luego vendieron al delantero de Hellín recuperaron esa cantidad. El resto fue un beneficio para su Elche.
Repito, no hay dinero para la negociación, pero sí para una operación urbanística. Aquí, como en el Casino, la banca (dígase los consejeros) siempre gana y al Elche le toca perder una vez más.
Hace ya mucho tiempo que se optó por judicializar al club ilicitano y eso ha cerrado la entrada a posibles futuros compradores. El Elche, aunque mucha gente vive en el mundo de «yupi», está al borde del precipicio. Si no hay un pacto con el banco del Consell, cuando llegue la denuncia de Europa, que vendrá, el club irá a liquidación. Lo mismo va a ocurrir con Eventos Petxina, cuando proceda a embargar. Está bien pensar sólo en los goles del equipo, pero cuando llegue el momento de que el dinero no alcanza para pagar a los profesionales llegará el llanto y el crujir de dientes de que habla la Biblia.
