Son muchos, quizás demasiados, los que opinan que el tren pasa una vez en la vida, y que si no lo coges en esa ocasión, no tendrás otra oportunidad de hacerlo. Prefiero ser de los optimistas, de los que piensan que por qué no va a haber segundas oportunidades. Y el ministro Íñigo de la Serna se ve que es de este último grupo. Ayer anunció que Fomento reactiva el viejo y demandado proyecto de unir por ferrocarril la estación del AVE de Alicante con el aeropuerto Alicante-Elche, una infraestructura a todas luces prioritaria para mejorar la conexión del quinto aeródromo de España -con un crecimiento que se antoja, de momento, imparable-. Este proyecto fue uno más de los que se llevó por delante la crisis y quedó aparcado en 2010. Ahora, la situación económica parece que mejora y permite alguna que otra alegría. Lo que no concretó el ministro fueron plazos, ni mucho menos inversión, pero seguro que estará muy por debajo de los 170 millones que contemplaba el anterior plan. Quizás lo más sencillo y económico sería hacer un ramal directo desde la estación de Torrellano al aeropuerto, sin más complicaciones, y a ser posible soterrado, para no comprometer el desarrollo futuro del entorno. Esta opción permitiría una conexión sencilla con Alicante y Elche, incluso con Murcia. Es evidente que el anterior proyecto ofrecía mejores soluciones y numerosas ventajas, pero si ahora, por las actuales circunstancias, toca descartarlo y optar por otro más sencillo, bienvenido sea. Esperemos que el próximo tren llegue pronto.
