Y pasó la Vuelta Ciclista 2017 por la circunvalación de Torrevieja dejando en evidencia varias cuestiones, algunas conocidas por todos, otras no. Que algunos «servidores públicos» utilicen asuntos de interés general persiguiendo réditos políticos particulares no es nuevo. Vienen haciéndolo con la Policía Local desde hace mucho tiempo sin importarles lo más mínimo la gravedad de la situación que atraviesa.

Como en evidencia ha quedado el inspector, que actuando como jefe accidental, primero informa que necesita 53 policías para garantizar el paso de la Vuelta por el casco urbano, para luego aparecer en las redes sociales que con 20 policías y algunos de Protección Civil se hubiera apañado.

Desde CC OO pedimos mayor responsabilidad cuando se trate de la seguridad ciudadana. Ni las vallas ni la cinta policial ni los voluntariosos chicos de Protección Civil están habilitados para ordenar, dirigir y señalizar el tráfico en las vías urbanas. Ya venimos observando disparates en la organización de eventos deportivos, procesiones, desfiles, etc., en los que afortunadamente no ha sucedido ninguna desgracia. Pero no tentemos a la suerte.

Dice el señor alcalde que Torrevieja necesita, al menos, 40 policías más. Otra evidencia. Pues ponga en marcha los mecanismos necesarios para convocar esas 40 plazas o más que tanta falta hacen. ¿Qué o quiénes se lo impiden? Y mientras, sigue asesorándose por charlatanes y vemos cómo no se materializa ninguna de las propuestas mil veces repetidas por este sindicato para intentar paliar estas carencias (modificación de la RPT, sacar policías de los despachos, ampliar plazas de operativo, crear una bolsa de servicios extraordinarios, acabar con los tratos de favor y un largo etcétera). Es evidente que para justificar seis mil euros al mes, mucho humo debes vender.

También es evidente que el titular de la Jefatura, Vicente Gutiérrez, está en otra dimensión, al margen de los quehaceres mundanos que conllevan su cargo, encelado en empitonar a un director general, que fue quien lo sacó de un rincón en Elda y lo trajo aquí, y a un alcalde que quiso contar con él, que le extendió su mano cuando comenzó su mandato hace dos años, mano que mordió a las primeras de cambio, denunciando en los juzgados el acuerdo de dicho alcalde con los sindicatos por el que 40 policías cobrarían 170 euros por sacar la dichosa Vuelta Ciclista de Torrevieja. Gracias a eso, aún no han cobrado y la mayoría no quiere echar más horas.

Era evidente la buena voluntad de un alcalde a quien podríamos recordar los versos de Alberti: «Se equivocó la paloma, se equivocaba». Y lo peor, se sigue equivocando.