Anteayer fue la última vez que pudimos hablar. Lo fue vía telefónica. Te encontrabas en el Hospital General de Elche, a punto de ser sedado, dada la inviabilidad de solución a tu gravísima enfermedad del cáncer y tras varios y tristes años del proceso de curación. Al recibir mi llamada, tu estimado y querido hijo José Antonio, me informó de tu situación, al propio tiempo de que pese a las conversaciones mantenidas los días anteriores, en estos momentos era inviable que pudiésemos hablar. En ese preciso instante al oír de tu hijo « Manuel Ortuño», le dijiste: «quiero hablar con Su Señoría aunque sea la última vez». Efectivamente, te sentiste con fuerza para cambiar impresiones, llevar a cabo una breve memoria de nuestro pasado en el ámbito familiar y también en lo político y despedirnos, con el aplomo, rigor, seriedad y humildad que te caracteriza.

José Antonio, con independencia de la innumerable cantidad de iniciativas en tu actuación y trayectoria como concejal del Ayuntamiento de Elche, especialmente referidas a las áreas de Deporte, y entre otras muchas destacaron los acuerdos de llevar a cabo las instalaciones deportivas que hoy existen en los barrios de la ciudad, así como de la ampliación de la Ciudad Deportiva, y otras muchas iniciativas y propuestas en los sectores sociales e industriales de nuestra ciudad y su término municipal, me viene al recuerdo de tu lucha y firme oposición a la petición reivindicativa de un grupo de vecinos de El Altet que instaron la segregación de dicha pedanía de nuestro término municipal. Tú, junto con Joan Gómez, Eleuterio Lillo, Dolores Bonmatí y otros, iniciasteis las acciones judiciales para evitar tal segregación. Obtuvimos sentencia favorable a tal segregación. Como esta iniciativa, podría mencionar muchas otras, pero lo más relevante que es digno de destacar para la memoria de tu personalidad ante la ciudadanía de Elche, me permito hacer referencia en concreto a dos cuestiones:

a) Gracias a ti, y a tu habilidad de estratega dentro de los órganos del Partido Popular, Eduardo Zaplana Hernández-Soro salió elegido en el congreso celebrado en Elche en 1989, como presidente provincial. Faltaban veinte minutos para comenzar el escrutinio de las votaciones, -frente a Juan Antonio Montesinos-, cuando advertiste a Eduardo Zaplana que, según tu seguimiento en las votaciones, perdíamos por ciento setenta votos. Eduardo te pidió y suplicó que consiguieras los votos suficientes en su favor para obtener la mayoría. José Antonio, ignoramos la forma y modo que instrumentaste. En los quince últimos minutos conseguiste doscientos doce votos de diferencia a favor de Eduardo Zaplana. Sin más comentarios.

En las elecciones municipales de 1995 Eduardo Zaplana y ante la oposición de nuestra ejecutiva local de admitir al candidato a la Alcaldía que nos imponían desde Alicante, te prometió «que de ganar la Presidencia de la Generalidad, se te nombraría director general de Deportes en la Comunidad Valenciana». Efectivamente, ganamos la Presidencia del Gobierno en la Comunidad y todavía estamos a la espera de tu nombramiento y designación como director general de Deportes. Sin comentarios.

b) Es destacar a título anecdótico tu colaboración e intermediación -en el terreno deportivo-, cuando se llevó a cabo la operación de venta del Elche Club de Fútbol a Lorenzo Sanz en Madrid. La operación se llevó a cabo a través de mi persona como letrado, la de Manuel Dobón y la del empresario Martín Minaya, con la compra por parte de Lorenzo Sanz de las acciones al que era presidente en aquel momento Ramón Sánchez a través de documentos contractualmente firmados y con entregas de pagarés superior a setecientos millones de pesetas y con el compromiso del empresario madrileño y otros importantes accionistas del Elche Club de Fútbol. Operación que hubo de dejar sin efecto con devolución de los pagarés, al oponerse el alcalde de Elche Diego Maciá, quien alegó que debía de ser empresarios de Elche los que ostentaran la presidencia y la mayoría de la titularidad de las acciones. Te recuerdo las varias reuniones y días que pasamos en Madrid para llegar a acuerdos y en el que tuviste la oportunidad de informar a Lorenzo Sanz de la trayectoria y vida deportiva del Elche Club de Fútbol, a cuya reuniones también asistía el célebre periodista deportivo José María García, y manteníamos encuentros y comidas en el bar-restaurante Alba, propiedad de Lorenzo Sanz, al igual que en su casa residencial en La Moraleja y que, por cierto, te encantaban y pasabas horas admirando la colección de cuadros de pintura y antigüedades que existen en dicha residencia. Lorenzo Sanz quedó sorprendido por tu trayectoria como deportista, al haber sido jugador del Ilicitano, campeón de España como jugador en la selección regional de Murcia y que en tu inicio de pasar al Elche Club de Fútbol sufriste la lesión de la rodilla y te impidió tus ansiadas y legítimas pretensiones de jugar con el Elche Club de Fútbol. También quedó sorprendido cuando le informaste que tú, yo y Marcial Pina Morales «Marcial» -jugador del Barcelona y del Madrid-, éramos compañeros en la infancia e hijos del Benemérito Cuerpo de la Guardia Civil y que tanto tú como yo nacimos en el Cuartel de la Guardia Civil de Altabix, muy próximo al campo de fútbol. Tú siempre has querido ser el sucesor de Marcial en el área deportiva.

José Antonio, siempre has hecho gala de lo que nos enseñaron de pequeños, hijos del Benemérito Cuerpo: «el honor es la principal divisa de la Guardia Civil», y también de lo que nos enseñó nuestro maestro Manuel Fraga: «la satisfacción del deber cumplido». Un abrazo.