Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Música crítica

Entre trago y trago

Diego el Cigala fusiona salsa y flamenco en el ADDA

Diego el Cigala

ADDA

Festival de Verano Geografía

Se coge la salsa de los años 60 y 70 y se le añade una buena dosis de flamenco. Todo bien fusionado y debidamente agitado con el cante de El Cigala y los músicos que le alientan. Diego forma parte de la música latina y afrocubana con su tono desgarrador. No es un salsero pero riega esas raíces. Recupera las esencias clásicas y rinde su particular tributo en este concierto y con el álbum Indestructible, algunos de cuyos temas, entre otros, asoman en la actuación acogida en el ADDA ante unos espectadores que llenaron el recinto. Interpreta Si te contara, Amar y vivir, Veinte años o Lágrimas negras, canción que da nombre al disco que grabó con el pianista Bebo Valdés. Indestructible viene de un CD de 1973, del que fuera percusionista de salsa y jazz latino, Ray Barreto, y con él homenajea a grandes cantantes como Héctor Lavoe, Cheo Feliciano, Ismael Rivera, Ismael Miranda, Bobby Cruz o Willie Colón. Así que Diego el Cigala reinterpreta la salsa, con su interés por mezclar músicas, y afloran los ritmos caribeños que provienen del son cubano y de géneros como el mambo, la guaracha, el chachachá o el guaguancó. Los metales, la batería, el piano, el bajo, las emblemáticas congas de la salsa o los dos coristas masculinos acompañan al gitano flamenco en su actuación. Las fuertes burbujas dan paso a la melodía y viceversa, y los arreglos jazzísticos prolongan los temas musicales excesivamente. El caluroso público escucha Juanito Alimaña, Inolvidable o El paso de Encarnación. Y la trepidante orquesta tapa al cantaor cuando la sonoridad estalla. El pianista impone belleza, y los demás también se lucen extrayendo todo el partido a sus instrumentos. El visceral Diego el Cigala populariza sus formas flamencas con los otros ingredientes que nutren esta labor de mestizaje. El hipnótico sonido del jazz circula junto a la juerga salsera y algunos boleros con la voz del sobrino de Rafael Farina. El amor, el desamor, el dolor o la alegría componen las letras. Entre trago y trago de combustible, desfilan Corazón loco, Periódico de ayer o Te quiero, te quiero, que la popularizó Nino Bravo. Aquí sobresale El Cigala solo con el pianista.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats