Cuando faltan dos meses para el anunciado referéndum unilateral de independencia en Cataluña puede ser interesante saber qué escenarios se dibujan ante dicha convocatoria€ en caso de que llegue a celebrarse, algo que el Gobierno central quiere impedir con todos los instrumentos legales a su alcance (a diferencia de lo que sucedió en el proceso participativo del 9 de noviembre de 2014).
La pregunta más importante a responder, dado el contexto actual (y si se celebra la consulta), es la de cuánta gente participará en el referéndum independentista, algo esencial para darle validez. Y ello es así pese a que los convocantes no han requerido un umbral mínimo de participación (precisamente, para no incentivar la abstención de los que ven ilegal el referéndum).
A pesar de estos condicionantes, a nadie escapa (ni en Madrid ni en Barcelona) que, de superarse el 50% de participación sobre el censo (que aún no se ha hecho público pero que se estima en 5.5 millones de electores, si atendemos a comicios recientes en Cataluña) y si se produjera una victoria del Sí a la independencia, una vuelta atrás en el proceso secesionista sería muy difícil.
Atendiendo a ello, ¿qué nos dicen las encuestas? Las más recientes (encargadas por el diario ARA y por el Centre d´Estudis d´Opinió, CEO, de la Generalitat) apuntan a una participación cercana al 65% (con victoria del Sí, en ambos casos). Pero, si observamos a fondo estos sondeos, para acercarse a la participación real debemos centrarnos en las preguntas de: "¿está usted de acuerdo con realizar un referéndum, quiera o no el Gobierno español? (CEO)" y "¿usted votará con seguridad, el 1 de octubre? (diario ARA)"? Pues bien, las respuestas son 48% y 54.9%, respectivamente. Con ese nivel de participación, ¿proclamaría la independencia Carles Puigdemont, tal como ha anunciado? La respuesta sigue abierta.