Por fin se ha hecho justicia. Tras años de protestas, el colectivo heterosexual podrá salir a las calles para reivindicar su identidad y celebrar su derecho a amar libremente. Todavía no sabemos la fecha del desfile ni el itinerario que seguirá, pero mis contactos en las altas esferas me han chivado ciertos detalles sobre el evento. Y como no quiero que ningún hetero oprimido se quede en casa ese día, voy a compartir mis averiguaciones con vosotros.
Según me han dicho, el desfile se abrirá con una enorme carroza en la que alguna destacada figura heterosexual irá exponiendo, micrófono en mano, todas las discriminaciones históricas que los heteros han sufrido por el simple hecho de serlo. Dado que la lista de agravios probablemente esté vacía, todo indica que elegirán como portavoz a alguien que esté preparándose unas oposiciones. Así, al menos, podrá aprovechar el rato de silencio para repasar el temario.
A continuación, veremos a representantes de distintos colectivos heterosexuales portando pancartas en las que se lean los insultos que han recibido a lo largo de su vida por ser heteros. El objetivo es reapropiarse de estos términos ofensivos y vaciarlos de significado hasta convertirlos en palabras que no puedan herir. Sin embargo, el contacto que me ha pasado está información está un poco preocupado porque, al no encontrar ejemplos en los que la heterosexualidad se utilice para mofarse de otra persona, van a tener que llevar las pancartas en blanco. Y claro, han quedado fatal con la empresa contratada para imprimir los carteles. Pero no pasa nada, lo importante es conseguir la visibilidad que tradicionalmente se les ha negado a las personas que no pertenecen a la comunidad LGTBI.
Algo parecido ha sucedido con otra de las carrozas. Estaban trabajando en una performance que mezclara danza y videoarte y en la que se incluyeran testimonios breves de adolescentes heterosexuales agredidos en el instituto o la calle debido a su sexualidad. Pues nada, no sabemos si es por miedo o por timidez, pero no han encontrado a ninguno que quiera compartir su experiencia. Es normal, son muy jóvenes y quizás no estén preparados para hacer público su sufrimiento. Además, es posible que teman la reacción de su entorno más cercano. A veces creemos que hemos avanzado una barbaridad, pero decirle a tu padre que no eres lesbiana ni trans todavía supone un desafío para muchas personas.
El desfile del Orgullo Hetero nace con vocación internacional y busca traspasar fronteras. Sus organizadores no han querido pasar por alto que, aunque en España los heterosexuales han alcanzado multitud de derechos, no ocurre así en otras latitudes. Por ello, una carroza mostrará un mapa gigante en el que estarán pintados de rojo aquellos países en los que ser heterosexual o practicar la heterosexualidad aún es delito y puede estar penado incluso con la muerte. Como van mal de presupuesto -por culpa del lobby gay el desfile no cuenta con subvenciones públicas ni patrocinadores- los responsables del evento han decidido no comprar ningún bote de pintura roja. Total, no lo iban a usar. Unos euretes que se ahorran.
Todo indica que será un día inolvidable, no puedo esperar a que llegue. ¡Ya basta de vivir con miedo y vergüenza! ¡Sal ahí fuera y grítale al mundo lo heterosexual que eres y lo orgulloso que estás de ello!
