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Francisco Esquivel

Caer del pedestal

Dentro de un programa con telón de fondo festero, Gemma Nierga no tuvo inconveniente en incorporar a la mesa de opinión a Carmen Herrero, catedrática de Fundamentos de Análisis Económico, estudiosa y conocedora de los problemas sociales relacionados con los aspectos que tienen que ver con la equidad o el bienestar social, que este año recibió el Jaime I de Economía. Bien, se le estaba hincando el diente a los llamados síntomas de recuperación, a si se podían repetir errores, a que quienes pagan las convulsiones son siempre los mismos... cuando Marc Giró, editor de moda de Marie Claire, colaborador del tramo frivolón en el que fue insertada la profe investigadora, se lanzó a la piscina: «Yo, que repaso las revistas del corazón, tengo la sensación de que los ricos cada vez son más desvergonzados en el sentido de que la clase media cada vez somos menos clase media; los pobres, más pobres y ustedes siempre dicen que no hay que vivir por encima de nuestras posibilidades. No, si aquí no hay quien viva ya por encima de nuestras posibilidades. Pero, aunque la fuente que tengo son las revistas del corazón, me da la sensación de que aquellos que llamamos ricos son más desvergonzados en la exposición de su riqueza, en el hurto del bien común...». Es probable que una gran mayoría se habría puesto de su parte de haberle contestado Inda que, aunque no participaba, puede salirte por cualquier lado. Pero no. Quien le replicó sin ofuscación alguna sabía de lo hablaba y además lo hizo con una sonrisa: «Yo creo que ahí hay un elemento que tiene que ver con la tolerancia de la sociedad. Vosotros le habéis dedicado todo un espacio a hablar de esta gente. Si no hablásemos de ellos, se les acabaría el negocio. En el fondo, los medios impulsan el poner en un pedestal a gente que forma parte de un grupo social cuya única gracia es la desvergüenza. La sociedad debería ser un poco más crítica». Nierga hizo un gesto como diciendo la que acabamos de comernos y, a partir de entonces, Giró estuvo de diez. Ya no dijo ni mu.

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