Tuve la suerte de estar con él apenas cinco seis meses y me marcó. En la temporada 2013-2014 hice la pretemporada con él, pero el club me mandó cedido al Real Murcia de Segunda División. Como no tuve muchas oportunidades y Christian Herrera subió al primer equipo me repescaron. Volví al filial en noviembre y, de ahí, al final de Liga me hinché a meter goles. Marqué 12. Una pena que no pudiéramos meter la cabeza en el «play off» de ascenso a Segunda. Perdimos en el último partido frente al Llagostera (1-0), lo que nos dejó con la miel en los labios. Es un entrenador que te dice lo que piensa siempre, capaz de sacar lo mejor de sus jugadores. Le gusta jugar en campo contrario, sus equipos están muy bien organizados y trata de mantener un ritmo alto de juego. Suele hacer guiños a la cantera y trata a todos por igual, veteranos y chavales. Es un perfecto conocedor de la categoría, en la que sólo la mala suerte le privó de subir a Hércules y Murcia. Creo que el Elche ha acertado con su contratación y ojalá lleve al club a Segunda División, de donde nunca debió salir.