Los eventos de postín han centrado la atención taurina de los últimos días. En orden cronológico, el Foro de la Juventud Taurina entregaba sus premios por noveno año consecutivo al estilo de los Goya o los Oscar americanos, con nominados y sobres intrigantes, mientras que el pasado miércoles los nuevos empresarios de Las Ventas (se llaman Plaza 1, a saber, tándem Casas-Nautalia) presentaban a bombo y platillo su primera Feria de San Isidro durante un acto de postín en el propio coso de la capital. Mientras aquel tuvo serios problemas para llevarse finalmente a cabo y no recibió el eco informativo merecido, este lució en todo su esplendor mediático, con alfombra roja, focos y sesión de fotos para la prensa (no me gusta el anglicismo «photocall»). Unos dependen de las ayudas y patrocinios altruistas; otros forman parte de la mercadotecnia de la empresa taurina más fuerte del momento. Mucha ilusión y poco dinero frente a mucho dinero y también, cómo no, ilusión de por medio.
Quizá habría que calibrar por parte de todos si la concentración en fechas tan cercanas de ambos eventos beneficia o, por el contrario, satura el mercado de noticias. Si añadimos el «I Congreso de Tauromaquia de la Comunitat Valenciana», que acabó hace siete días, y alguna otra entrega de premios más acaecida en esta semana, se antoja demasiado azúcar para tan poco espacio de tiempo. Se podría imaginar que, quizá, si los egos bajaran exigencias y unos cuantos que organizan todo esto se sentaran alrededor de la misma mesa con buenas intenciones y un calendario de por medio, a buen seguro que sería factible consensuar mayor acopio de fuerzas y lograr darle sentido, contundencia, variedad y duración. Igual la Fundación del Toro de Lidia, a quien tanto pedimos y de quien tanto esperamos, y que anda ahora sembrando en el ámbito universitario, podría ejercer de mediadora y proponer además la creación de algo así como la Academia de la Tauromaquia, ya que tanto de espectáculo, de cine y de teatro se está copiando en estos años.
De todos modos, quizá haya quien replique que estas fechas deben contener toda la pólvora publicitaria para encender con seguridad la mecha de Fallas, Abril y San Isidro, que focalizan algo así como el Mundial del toreo. A colación de los recién conocidos carteles para Las Ventas, hay que recordar que la presencia alicantina se centra en el doblete de Manzanares y de Andy Cartagena. Vuelve José Mari para la Beneficencia (16 de junio) con un auténtico cartelazo, junto a El Juli y Talavante, con toros de Victoriano del Río, y antes realizará su único paseíllo isidril el primero del mismo mes en compañía de Cayetano para la confirmación de Joaquín Galdós, frente a toros de Juan Pedro Domecq. Por su parte, el rejoneador benidormí, olvidado en las primeras grandes ferias, pisará el ruedo madrileño el 14 de mayo junto a Sergio Galán y Manuel Manzanares (en su única actuación), y siete días después con Diego Ventura y Leonardo Hernández. Las combinaciones isidriles han constatado que, salvo Alejandro Talavante, las llamadas figuras no están por la labor de revolucionar el concepto del espectáculo que el productor Simon Casas tanto había cacareado. Ya lo hemos comentado desde esta misma ventana en ocasiones anteriores: el efecto Casas, a saber, las imaginaciones verbalizadas del francés que luego bajan a la realidad en picado. Por muchos añadidos de Beneficencia y Cultura que se hagan. El vate preso de sus propias palabras.
Y en Alicante, para terminar, hemos asistido al cruce de declaraciones entre las ediles Gloria Vara y Marisol Moreno. La primera, asegurando la continuidad de la actual empresa si pidiera la prórroga, o un nuevo pliego en caso contrario. La segunda, disfrazándose de supuesta demócrata, pidiendo una consulta a los ciudadanos para priorizar los usos de la plaza de toros. Le deben de haber dicho a La Roja que el traje de abolicionista no le reporta aumento de votos y le tira mucho de la «sisa» de la libertad (aquello tan de izquierdas de «prohibido prohibir»; vamos, «sisar» derechos). Una consulta «megademocrática» que gestionarían ellos desde una web creada «ad hoc» muestra mucho mejor talante, dónde va a parar. Dice, además, que quiere saber los números de la gestión de 2016 de la plaza de toros. En eso coincidimos, mire usted por dónde.
