La novela Media vida de la escritora nacida en Mataró y llamada Care Santos, ha obtenido el Premio Nadal del año 2017, y leo que en dicha obra su autora se adentra en la psicología de una generación que tuvo que sobrellevar la hipocresía de una sociedad en la que se debían mantener las formas a cualquier precio, y que narra el trayecto vital de cinco mujeres desde la dictadura hasta la transición, con su reencuentro después de treinta años sin verse, recordando la época que compartieron en un internado de monjas, y la noche en la que sus destinos quedaron marcados para siempre a raíz de un juego inocente.

Y parece que la novela es una historia sobre las relaciones humanas, el perdón y el paso del tiempo que retrata a esa generación de mujeres que tuvieron que construir sus vidas con inteligencia y coraje, buscando nuevos caminos a propósito del amor y la libertad. Capta mi interés las manifestaciones de la escritora sobre la amistad, diciendo que es una de las mejores relaciones que puedes tener en la vida y que es más ventajosa que el amor, pues resulta menos exigente y te permite una mayor libertad.

Y es que la amistad es una bella palabra y sentimiento pues consiste en el lazo invisible y en el vínculo de afecto que nace con personas que, de manera casi mágica, se convierten en seres imprescindibles en nuestra vida y con los que podemos compartir experiencias y sentimientos, estar seguros y confiar en ellos sin ninguna duda.

Requiriendo esa amistad verdadera, de esfuerzo y dedicación mutua, hasta crear un nexo capaz de mantenerse en el tiempo, y en la que buscamos y ofrecemos apoyo mutuo, cimentándose en valores como la sinceridad, el respeto, la confianza, la capacidad de escuchar y el perdón, fortaleciéndose nuestra autoestima y el placer de sentirnos acompañados, además de darnos la seguridad de contar con alguien incondicional en todo momento. De manera que me apetece mucho regalar a mi madre la novela de esa escritora, periodista y crítica literaria, que cuenta la historia de cinco mujeres que como niñas se conocen en los años ochenta y que se reencuentran después de treinta años, para saber qué ha sido de sus vidas durante ese tiempo de fuertes cambios políticos y sociales, y para intentar encontrar el perdón que la madurez y el paso del tiempo les ofrece. Y, sin más, compro un libro regalo sorpresa para mi madre. Miro la portada de la obra, sonrío y decido que yo también quiero leer esa historia que se me antoja atractiva e interesante, y que me apetecería mucho viajar a la costa de la provincia de Barcelona, concretamente a Mataró, ciudad donde nació esta escritora llamada Care Santos, cuya obra me ilusiona tanto conocer.