El lunes de buena mañana me encuentro en el tren de cercanías a mi amigo Jesús Fernández Montejano, que trabaja en la televisión murciana, y se va a grabar la agenda cultural para toda la semana. Me pasa su guión para que les eche un vistazo. «Para que compares con Alicante». Sin saber, o a sabiendas, que me da donde más me duele. Sea. El destino lo ha querido. Miro días y horarios. Mis ojos se van como dardos hacia la palabra teatro. Me encuentro con representaciones de El público en la versión de Álex Rigola, con Nao Albet e Irene Escolar; y de La cantante calva en el Mc Donald, de Lluïsa Cunillé. También me encuentro con Nosotros no nos mataremos con pistolas, de la que Jesús destaca el premio Max a la autoría revelación, Víctor Sánchez.
Se trata de una semana cualquiera, elegida al azar, y compruebo cómo sin que necesidad de que exista en Murcia una Muestra de Teatro de Autores que valga, el menú es más que nutritivo. Y lo mejor es que hay un público para ello. Durante todo el año. Mi cabeza, desde el tren de cercanías por Torrellano, viaja entonces hasta Valladolid, donde este fin de semana tiene lugar el estreno nacional de El cartógrafo, de Juan Mayorga, protagonizado por Blanca Portillo y José Luis García Pérez. Un montaje que en su momento sustituyó al previsto inicialmente, el texto inédito de Alberto Conejero Todas las noches de un día, que iban a poner en escena los mismos dos actores. Y me pregunto cuán hermoso hubiera sido ver en Alicante lo nuevo de Juan Mayorga, o séase, un estreno nacional relevante de campanillas. Y más producciones de la misma altura, que haberlas haylas. Desde Páncreas de Patxo Tellería hasta el Idiota que arrasa en el Teatro Kamikaze. Dramaturgias de autores vivos, de aquí y ahora. Potentísimas. Mediáticas. Verdaderamente relevantes. Recordemos que la Muestra cuenta con un presupuesto equivalente al de nuestro Teatro Principal durante un año completo.
No seré yo quien ose poner en entredicho un evento que cumplirá 25 años en 2017. Sería de tontos. Para una vez que políticos de distinto signo han sumado fuerzas durante tanto tiempo no la vamos a cuestionar, no sea que cierren el grifo. Pero tampoco es cuestión de no ver aquello que es obvio.
