De nuevo otro cisne negro en los mercados financieros. La victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales americanas, tal y como ocurrió con el «Brexit», el resultado menos esperado por los mercados, encuestas y analistas es el que se impuso finalmente. Esta circunstancia ha hecho que los mercados hayan reaccionado con una enorme volatilidad ante lo imprevisible del nuevo escenario que se presenta.

Ante este nuevo escenario, el pasado miércoles, los mercados de renta variable abrieron con fuertes pérdidas (alrededor del 5%), sin embargo, el discurso inicial de Trump, mucho más sosegado y conciliador de lo que nos tenía habituados hizo que estas pérdidas se tornaran ganancias. En cualquier caso, como casi siempre en estas situaciones, los nuevos escenarios generan perdedores pero también ganadores. Las promesas por parte de Trump de una mayor expansión fiscal (aumento del gasto público en infraestructuras) ha provocado importantes subidas en empresas españolas con intereses en USA (ACS +5,22%, Acerinox +5,72%). Otro sector inicialmente beneficiado, dado el tono más belicista de Trump, es la industria de defensa, en Europa claros ganadores son BAE Systems (+6,75%) o Meggitt (+3,94%). En España, Indra es la compañía con mayor peso en el sector de defensa, aunque con mucho menos peso que las mencionadas anteriormente. Otros dos sectores claramente beneficiados por la victoria de Trump son el bancario (mayores tipos de interés han de mejorar el margen de intermediación) y el farmacéutico (retirada del Obamacare).

En el mercado de divisas las oscilaciones también han sido considerables con caídas iniciales en el dólar que luego se han dado la vuelta ante las perspectivas de unos tipos de interés más altos en EE UU por una mayor expansión fiscal (promesas de mayor gasto) y sus críticas en campaña a las políticas de tipos cero mantenidas por la Reserva Federal. La libra, por su parte, ha recorrido también un camino de ida y vuelta y tras las fuertes caídas iniciales ha subido de forma importante por las esperanzas de una mayor aproximación comercial entre EE UU y Reino Unido que compensaría su alejamiento de Europa tras el «Brexit». Por otra parte, en el mercado de divisas el principal perjudicado ha sido sin duda el peso mejicano con caídas superiores al 10% ante las políticas migratorias y la eliminación de acuerdos comerciales propuestas por Donald Trump. En este punto, el referente al comportamiento de las divisas, es donde en Gesem Agencia de Valores hemos notado más inquietud por parte de nuestros clientes, en su gran mayoría de la provincia de Alicante, tanto por su repercusión en sus posiciones financieras como, sobretodo, las consecuencias que pueden tener estos movimientos en su actividad empresarial; que la realidad es no son menores. La fuerte caída del peso mejicano va a suponer un importante perjuicio para muchas compañías del sector del calzado, las exportaciones a México se habían incrementado de forma importante en los últimos años, una divisa tan depreciada va a hacer poco competitivo en precio al sector. Otro sector fuertemente afectado será el constructor que durante la crisis española ha ido abriendo mercados en Latinoamérica y uno de los destinos preferidos ha sido México, los activos que se tienen allí han perdido mucho valor y afrontan un futuro incierto. A nivel nacional uno de los principales perjudicados por esta circunstancia es OHL (-4,53%).

Por el contrario, dentro de los factores positivos, tenemos la fuerte recuperación de la libra, que de tener continuidad, puede ayudar al sector turístico de la región (el turismo británico es su principal fuente de ingresos). El sector inmobiliario también puede ver mejorada parcialmente su situación ya que los británicos eran unos de los principales inversores inmobiliarios extranjeros en la región y las caídas de la libra tras el «Brexit» habían encarecido enormemente la compra de vivienda para ellos.

En definitiva, como casi siempre estas situaciones generan nuevos retos y nuevas oportunidades de las que con un correcto análisis, agilidad y flexibilidad en la toma de decisiones se puede sacar provecho. Características que el sector empresarial de nuestra región ha dado más que sobradas muestras de tener.