Al tiempo que la Universidad de Alicante celebraba el 40 aniversario de la creación de su Facultad de Filosofía y Letras, llega la noticia del fallecimiento del profesor Juan Manuel Del Estal, uno de sus pioneros, pues ejerció su docencia desde el curso 1969-70, cuando era todavía C.E.U., hasta su jubilación en 1996, cuando marchó a Asturias, tierra natal de su esposa.

El doctor Del Estal fue para quienes compartimos con él aquellos años, un ejemplo de trabajo y de discreción juiciosa y mesurada. Hasta la llegada del doctor Hinojosa Montalvo, fue él quien se hizo cargo en solitario de la enseñanza de las disciplinas relacionas con el medievo. Y fue un concienzudo investigador sobre las tierras alicantinas desde el siglo XIII hasta finales del XV, cuando Alicante recibió el título de ciudad el 25 de julio de 1490 por Fernando el Católico, cuyo texto latino de concesión, y su versión castellana, publicó en 1990 al socaire de las conmemoraciones del V centenario de aquella efeméride.

Con su Colección Documental del Medievo Alicantino, el doctor Del Estal vino a cubrir un gran vacío y a la vez una necesaria labor de depuración, con multitud de documentos inéditos, acompañados de cientos de anotaciones ajustadas y comentarios precisos. En 1982 editó su Conquista y anexión de las tierras de Alicante, Elche, Orihuela y Guardamar al Reino de Valencia por Jaime II de Aragón en 1308, en el que presentaba el Acta de Anexión de aquellas villas, documento que De Estal consideraba el fundamento histórico de la autonomía valenciana en lo que respecta a la antigua Gobernación de Orihuela.

Dos años más tarde editaba los Documentos inéditos de Alfonso X el Sabio y de su hijo D. Sancho con motivo del VII centenario del rey castellano. La conquista y repoblación de Orihuela y Alicante por el entonces infante Alfonso, casado posteriormente con Violante de Aragón, hija de Jaime I, dio motivo a Del Estal a demostrar que tanto Orihuela como Alicante tuvieron que ser tomadas por las armas, frente a quienes defendían su capitulación.

Alicante y las tierras del sur valenciano siempre estuvieron en el centro de las investigaciones del profesor Del Estal. Gracias a su dedicación pudo cubrirse el hueco de Jaime II en los itinerarios de los monarcas de la Casa de Aragón desde Jaime I hasta Martín I el Humano, y siempre utilizando documentación procedente de la cancillería, pues el apego crítico al documento fue una de las señas de identidad de su labor historiográfica. En la Historia de la ciudad de Alicante, dirigida por Francisco Moreno Sáez, que hoy es sin duda la mejor síntesis del acontecer histórico de la ciudad, Del Estal se ocupó en el II volumen de la obra dedicada al medievo alicantino de los capítulos referidos a la conquista y repoblación y a las instituciones políticas.

Fue correspondiente de la Academia de la Historia. La lejanía de la distancia no hizo disminuir el afecto y la admiración de quienes fueron sus discípulos y de los que tuvimos la fortuna de compartir con él unos años de consolidación de lo que hoy es la Universidad de Alicante.