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Marc Llorente

Tocata y fuga

Premios José Estruch / «Two ladies or not two ladies»

Teatro Principal de Alicante

La gala de entrega de los Premios José Estruch, en el Principal de Alicante, comenzó una vez finalizado el espectáculo Two ladies or not two ladies. Unos galardones que nacen con voluntad de permanecer. Que pretenden difundir las artes escénicas y recuperar el nombre de este profesor y director teatral alicantino del que se cumple el centenario de su nacimiento. El público fue numeroso en la primera parte. Aun así, hubo fugas que se acentuaron al concluir la actuación y tras una prolongada pausa.

El hecho de que los premiados no tuviesen un gran poder mediático pudo empujar a la huida, a lo que se debe añadir la flojedad teatral de un montaje que quiere ser una comedia humorística llena de gamberrismo y ternura. Algo hay de todo eso pero sin especial relieve. Hubo división de opiniones, incluso visibles enojos, y un aplauso notable para los valencianos Noèlia Pérez y Josep Zapater, creadores y directores de una especie de concierto con la decadente y alcohólica diva de la canción junto al tímido acompañante, hombre-mujer en plan friki, que al final se descubre.

Interpretan canciones distorsionadas y en clave cómica, aunque sin sacar todo el partido posible al casi inexistente guion, ya que no hay una dramaturgia, pese a la colaboración del autor Rodolf Sirera y al asesoramiento en la dirección de Carles Alfaro, que pueda aportar mayor lustre a esta «oda a la supervivencia» y a la necesidad de amar. Entre otras piezas, Non, je ne regrette rien (Edith Piaf), Over the rainbow (Judy Garland), Yersterday (The Beatles), el bolero Bésame mucho, Whith or without you (U2), el poema musicalizado Cançó de la rosa de paper, de Vicent Andrés Estellés, o Moon river (de la película Desayuno con diamantes) y algunos temas propios. Teclado, guitarra eléctrica y compenetrados colegas con capacidad para cosas mejores. Lo demuestran por lo que hace cada uno. Pero no es suficiente de cara a construir un cabaret mínimo, especial para distancias cortas.

El asunto se alargó más de la cuenta, y la entrega de premios quedó en segundo plano. Vene Herrero y Marisol Limiñana cumplieron con su papel de maestras de una ceremonia que pudo brillar más y ofrecer imágenes de la exposición sobre Estruch que se puede ver en el Principal. Triunfa La piedra oscura. Pocos la vieron en abril.

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