En estos días vemos como desde el tripartito se intenta justificar la paralización que sufre la ciudad, a todos los niveles, con la venta de proyectos a realizar en un futuro próximo. Consideramos que estamos ante una mera propaganda para tapar las vergüenzas de un Gobierno que es incapaz de llevar adelante nuevos proyectos y que además ha deteriorado de una forma alarmante servicios básicos como el mantenimiento, alumbrado y limpieza. Sobre todo en este último caso donde son constantes las denuncias de vecinos y asociaciones de todos los barrios y pedanías de nuestra ciudad.

La última ocurrencia de este tripartito pasa por seleccionar quienes tienen que intervenir en nombre de los ciudadanos en el debate sobre el estado de la ciudad, impidiendo que ciudadanos anónimos hagan legítimas reivindicaciones del verdadero estado en el que se encuentra la ciudad. Populismo al poder.

Pero hagamos un recordatorio de lo que llevamos de legislatura, que se ha caracterizado, en primer lugar, por una debilidad política del alcalde y del equipo de gobierno en general. Llevamos dos tripartitos, que gobiernan la ciudad en minoría, transmitiendo desgobierno, desavenencias, reproches y desencuentros continuos entre los socios; lo cual, como no podía ser de otra forma, ha llevado a paralizar casi todos los proyectos municipales que tenía en marcha la ciudad.

En segundo lugar, en esta primera etapa de PSOE y Compromís hemos visto como su mayor preocupación y más urgente era la colocación de asesores, amigos y familiares, en puestos de designación a dedo. No les ha faltado tiempo en subir la cifra de asesores que tenía el Partido Popular de 13 a 21 en el Ayuntamiento.

En tercer lugar, otra medida del tripartito fue subir de forma generalizada el IBI a todos los ilicitanos, incrementando casi un 7% el recibo de contribución.

En cuarto lugar, cabe recordar que este tripartito ha decidido devolver a Europa una subvención de 800.000 euros para un gran proyecto de Eficiencia Energética, que consiguió el PP para Elche. Dicho proyecto llevaba consigo un cambio en todo el alumbrado publico, así como hacer más eficientes los edificios públicos, es decir, disminuir la factura de la luz que pagamos todos los ilicitanos a la vez que se tenía bien iluminada todo la ciudad. Un proyecto del siglo XXI que compartíamos con cinco ciudades de España elegidas por Europa por sus buenos proyectos, y todo esto se cambia por una ridícula colocación de sensores en algunas farolas. Esperemos que este capricho que sólo perjudica a Elche sea explicado por algún responsable de este Ayuntamiento.

En quinto lugar, esta falta de actividad política y de liderazgo nos ha llevado a ser una ciudad con un estado de suciedad insoportable. Día tras día asistimos a un estado lamentable de suciedad y falta de mantenimiento que padece Elche, en barrios, polígonos industriales, pedanías, zonas verdes, parques y jardines o huertos de palmeras; tenemos basura sin recoger, contenedores malolientes, maleza sin limpiar, árboles sin podar, y excrementos de perro por todos los lugares; y nadie pone solución a este tema tan grave y tan básico.

En sexto lugar, y por último, aunque más cuestiones quedan por tratar, que por falta de espacio resulta imposible, esta paralización de la ciudad ha afectado, y de qué manera, a los dos grandes proyectos que tenía Elche en marcha, solucionados después de muchísimos años por el PP, que llevan consigo una mejora de la calidad urbana, turística y de empleo en toda la ciudad. Me refiero al proyecto del Mercado Central, un proyecto de ciudad y de mejora evidente de todo el centro histórico, y el Hotel de Arenales del Sol, que tantos cambios produciría en esta zona turística, carente de servicios básicos, y que sin duda su construcción sería un revulsivo para conseguirlos. Pues bien, como todos conocemos, ambos languidecen en el tiempo, con esta dejadez y desidia de PSOE y Compromís, que buscan su desaparición por completo. Una auténtica vergüenza.

Año y medio perdido que no merece otra nota que un rotundo suspenso.

Debemos decir que la casi totalidad de proyectos que viene enumerando el señor González son continuación de los proyectos ya iniciados por el PP en la anterior legislatura: reconstrucción del barrio de San Antón, alcantarillado de Peña de las Águilas, colectores de aguas residuales y pluviales de Carrús, peatonalización de la Corredora, Plan Especial del Palmeral, etc. Como alguien me decía después de las elecciones de 2015: «Les habéis dejado la legislatura hecha al nuevo Gobierno con todos los proyectos puestos en marcha y vuestro trabajo por mejorar la ciudad». Pero PSOE y Compromís ni saben aprovecharse de ello y tienen todo paralizado. El ejemplo más llamativo es el del barrio de San Antón en el que deberían estar ya en construcción los tres bloques restantes y ahora hasta han perdido la subvención de Europa dentro del Plan DUSI para llevar a cabo la segunda fase de reconstrucción del barrio.

O la peatonalización de la calle Corredora que es un proyecto que está incluido dentro del proyecto del Mercado Central, y, para una vez que no va a costar una obra ni un euro a los ilicitanos, el señor González y la señora Mollà quieren que ese dinero salga del bolsillo de todos nosotros.

En definitiva, estamos asistiendo a lo que caracteriza a los Gobiernos de izquierdas: propaganda, publicidad, derroche y despilfarro de dinero público en asesores y enchufismo, empeoramiento de servicios públicos (en especial la limpieza), paralización e inactividad municipal de grandes proyectos beneficiosos para la ciudad, y vemos como esta situación ya está empezando a pasar factura, y Elche, que estaba creando empleo por encima de la media nacional, ahora está sufriendo más desempleo. Lamentable y triste.